La subida más modesta en los convenios colectivos en el conjunto de Castilla y León es el 0,27% de la provincia salmantina
Con el objetivo de «mantener y/o crear empleo de calidad», la CEOE por un lado y CCOO y UGT por el otro pactaron en junio del año pasado que «los salarios negociados deberían subir en 2015 hasta el 1% y en 2016, hasta el 1,5%». Un mes después, la patronal regional Cecale y la representación de los dos sindicatos en Castilla y León rubricaron un documento en el que se reconocía que la brecha que separaba los sueldos regionales de los nacionales se había agrandado tanto que se hacía necesario recomendar a los negociadores que contemplasen «un incremento salarial que permita gradualmente en los próximos años equiparar los salarios medios de nuestra comunidad con los del Estado».
La subida salarial media pactada en los convenios colectivos registrados hasta el mes de abril de este año se situó en Castilla y León, y por lo tanto en Salamanca, en el 0,85%, más de un cuarto de punto por debajo del 1,11% acordado en el conjunto de España. Mientras la media del país está, pues, dentro de las directrices del III Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva, el dato que presenta Castilla y León no se ajusta ni a estas, ni tampoco a las recomendaciones de los agentes sociales de la comunidad.
A los trabajadores asalariados de la región les queda al menos el consuelo de pensar que el año pasado por estas fechas, la subida salarial que pactaban los negociadores sectoriales y de empresa era del 0,52%, exactamente el mismo porcentaje de incremento con el que se cerró el ejercicio de 2015 en Castilla y León (del 0,74% en la totalidad de España). También conforta hasta cierto punto saber que la variación salarial regional supera la tasa del IPC interanual avanzada del mes de abril (-1,1%) publicada por el INE.
Según las cifras provisionales del Ministerio de Empleo y Seguridad Social, a 30 de abril pasado había firmados en la comunidad 159 convenios con efectos en 30.290 empresas y 139.803 trabajadores. De ellos, 89 eran acuerdos de empresa y los 70 restantes, de ámbito superior, es decir sectoriales. Los primeros amparan a un total de 9.168 trabajadores e incluyen una subida salarial media del 0,97%; mientras que los segundos afectan 130.635 empleados, que agrupados tienen un incremento retributivo medio del 0,84%. Estos dos porcentajes de revalorización son, en el conjunto del país, del 0,72% y 1,13%, respectivamente.
El año pasado, el salario medio de un trabajador de Castilla y León fue, según la Encuesta de Costes Laborales de INE, de 1.716 euros brutos al mes, una cantidad que es más del 10% menor (179 euros) que los 1.895 que ingresaron en promedio el conjunto de los españoles.
Los más afortunados
Dentro del panorama regional y en los cuatro primeros meses de 2016, los convenios con las subidas salarial más elevadas son los 34 firmados en la provincia de León, que incluyen un alza media del 1,21%, y los de ámbito autonómico, ocho acuerdos con un aumento de sueldos del 1,13%.
El primer lugar del podio, no obstante, lo ocupan los once convenios colectivos de empresa de Palencia (1.372 trabajadores afectados), con un incremento del 1,56%; seguidos del único convenio empresarial registrado en Soria, con subida del 1,50%. Mientras, los 17 acuerdos firmados en empresas de Valladolid propician para sus 1.445 trabajadores un alza salarial medio del 1,38%. Los cuatro convenios de Zamora arrojan un 1,23% y los 19 de Burgos, del 1,08%. La subida más modesta es el 0,27% de las cuatro empresas (783 trabajadores) de Salamanca.
Sectorialmente, el 1,22% de León y el 1,18% de alcance autonómico son los aumentos más elevados, por detrás de los cuales se sitúan el 1% de Ávila, el 0,97% de Segovia y el 0,73% de Palencia. En Valladolid la media sectorial es del 0,65% y en Salamanca, del 0,66%.
Por otro lado, la aparente recuperación económica no se está traduciendo en una reducción del tiempo medio de trabajo en las empresas de Castilla y León. En los cuatro primeros meses de 2016, la jornada laboral media pactada es de 1.766 horas al año, siete horas más que las 1.759 horas de media nacional y nueve más que las 1.757 horas que presentaba la comunidad el año pasado por estas mismas fechas.
En datos de nivel nacional, la estadística revela que hasta abril se registraron 600 inaplicaciones de convenios, el 11,6% menos que en igual periodo de 2015, que afectaron a 11.259 trabajadores, la mitad que un año antes. En el 92,7% de los casos, las empresas se descolgaron de la cuantía salarial pactada en convenio.
El 65,3% de los trabajadores afectados por los descuelgues se concentró en el sector servicios y el 41,8% trabajaba en empresas de uno a 49 trabajadores, según informa Europa Press. El descuelgue de los convenios supone la revisión de las condiciones laborales en las empresas. La reforma laboral introducía mayor facilidad para que empresarios y trabajadores pudieran pactar estas inaplicaciones. El objetivo, según el Gobierno, era el de evitar despidos.
Fuente: El Norte de Castilla