Hace no muchos días, nos sorprendíamos con la noticia del acuchillamiento a un policía municipal de nuestra ciudad, en acto de servicio. Nos asombramos viendo el video de la agresión, que corrió como la pólvora por las redes sociales, sin darnos cuenta de que es el pan nuestro de cada día para estos hombres que patrullan Salamanca. Sólo que esta vez, alguien lo recogió en su móvil.
¿Sabían ustedes que los chalecos anti-balas y anti-cortes se los tienen que pagar de su propio bolsillo si los quieren tener?
Yo tengo el placer y el honor de conocer tanto el Cuerpo como a algunos de los hombres y mujeres que lo forman y, por eso, desde este gran púlpito que es SALAMANCArtv AL DÍA, quiero dar las gracias a la Policía Local de Salamanca y, por extensión, a todas la Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado (y bomberos), y les digo:
Gracias por estar cuando no están los demás.
Gracias por jugaros la vida por desconocidos.
Gracias por aguantar que os digan que es vuestro trabajo.
Gracias por convencer a un suicida para que no lo haga.
Gracias por proteger al indefenso del abuso.
Gracias por detener cientos de veces al mismo delincuente, aunque los jueces lo dejen en la calle el mismo día.
Gracias por no cejar en vuestro empeño.
Gracias por promover la vida sana y el deporte entre los jóvenes? y los no tan jóvenes.
Gracias por mediar en vez de detener.
Gracias por tener miedo y sin embargo hacerlo.
Gracias por hacernos sentir seguros por las calles y en nuestras casas.
Gracias por no disgustaros cuando veis que en otros países se os tratan como héroes y aquí como "pitufos".
Gracias por aguantar estoicamente las barbaridades de la vida.
Gracias por soportar a los estúpidos que os preguntan si habéis matado a alguien y no a cuántos habéis salvado.
Gracias por hacernos respirar de alivio cuando oímos vuestras sirenas acercándose en momentos difíciles.
Gracias por rescatarnos de entre el infierno, sin pensar en vuestra seguridad.
Gracias por haber ido más allá de lo que exige el deber.
Gracias a la Policía Local de Salamanca por muchas razones, y recordad siempre que vuestro trabajo os honra.