El tabú interno en el PP sobre lo bien que haría Mariano Rajoy en echarse a un lado y ceder el testigo a alguien sin sus onerosas hipotecas políticas no parece que pueda mantenerse durante mucho más tiempo. En privado empiezan a ser legión los dirigentes y cargos públicos de aquí y acullá que consideran inevitable que Rajoy debería quietarse de en medio no tardando; incluso ha habido uno, el presidente de la Diputación de León, Juan Martínez Majo, al que se le llegado a escapar esa opinión en una entrevista concedida al digital "ileon.com".
Y aunque no es el caso de "La Razón" del inefable Marhuenda, ya hay medios afines que empiezan a manejar quinielas. "Abc" publicaba ayer una con ocho nombres, la mitad de los cuales mantienen vinculación con Castilla y León, aunque solo uno de ellos fue electo en las pasadas elecciones por una circunscripción de esta comunidad. Además de la vicepresidenta en funciones, Soraya Sáez de Santamaría, la lista incluía a la también vallisoletana y asimismo diputada por Madrid, Isabel García Tejerina, titular de la cartera de Agricultura, así como a la ministra de Fomento, Ana Pastor, zamorana de nacimiento aunque afincada hace muchos años en Pontevedra, por donde siempre ha sido diputada del Congreso.
El cuarto castellano-leonés el palentino Pablo Casado, vicesecretario de Organización del PP y diputado por Ávila en ésta y en la anterior Legislatura. Los otros cuatro nombres son los del presidente gallego, Alberto Núñez Feijóo; su homóloga madrileña, Cristina Cifuentes; el alcalde de Santander, Iñigo de la Serna; y la alcaldesa de Logroño, Concepción Gamarra.
Dado que resulta impensable que, llegado el caso, la sucesión de Rajoy, se solvente mediante elecciones primarias, ningún notable del PP se verá en el disparadero de tener que manifestar públicamente sus preferencias. Ni pensar quiere "El topillo" en el trance en que se vería el presidente de la Junta y del PP en Castilla y León, Juan Vicente Herrera, quien bebe claramente los vientos por su amigo Alberto, si al final todo quedara en un mano a mano entre Feijóo y Sáez de Santamaría, con diferencia los dos candidatos mejor colocados en esa carrera.