Escribo este post pocos minutos después de que Pedro Sánchez firme con Albert Rivera en la Sala Constitucional del Congreso de los Diputados un acuerdo de investidura y legislatura para impulsar ese gobierno de cambio y de reformas que liderado por el PSOE pueda traer un nuevo momento político en España.
He señalado la hora a propósito ya que esta tarde los equipos negociadores de PSOE, Podemos, IU y Compromís volverán a reunirse para avanzar en los bloques temáticos que acordaron en su primera reunión.
Hay avances, notables. El diálogo fomenta los acuerdos y la ruptura de las posiciones que al principio parecían inamovibles. Ciudadanos ha pasado de apostar por no ir más allá de una abstención a Pedro Sánchez a firmar un acuerdo en el que se compromete a votar favorablemente. Podemos ha pasado de exigir sillas a negociar políticas.
Ahora toca al resto de fuerzas políticas que defienden la necesidad de un cambio en nuestro país estar a la altura de lo que los ciudadanos nos pidieron el 20 D. Ahora es el momento de la responsabilidad y no de la exigencia. En unas horas lo sabremos.
Mañana, este artículo será pasado. ¿Por suerte?