Ciertamente, no estuvo muy afortunado el presidente de la Junta cuando, en el fragor del toma y daca parlamentario en el pasado pleno de las Cortes, se jactó de que los socialistas hubieran sido "muy torpes" por no haber solicitado su comparecencia ante la comisión que investiga la llamada "trama eólica". "Ni la Junta ni su presidente se han negado nunca a comparecer", dijo.
Como no podía ser de otra forma, dicha jactancia ha sido interpretada como una provocación. Y no solo por el grupo socialista, sino por la totalidad de la oposición, que ha reaccionado en bloque ante esa respuesta de Herrera. Ayer mismo los portavoces de los cuatro grupos (PSOE, Podemos, Ciudadanos y Grupo Mixto) acordaban solicitar una reunión extraordinaria de la comisión eólica para abordar de nuevo el asunto de las comparecencias. Y al centenar largo de nombres rechazados la semana por el grupo popular han añadido -mejor, han antepuesto el de Juan Vicente Herrera.
A través del presidente de la comisión, Juan José Sanz Vitorio, el PP ha adelantado que volverá a oponerse a dicha pretensión, pero si ello es así al menos quedará claro que si Herrera no comparece será por decisión exclusiva de su partido y no porque no lo haya solicitado la oposición. Parece claro que el afán de proteger al ex consejero de Economía, Tomás Villanueva, máximo responsable político de los presuntos pufos investigados, le ha jugado una mala pasada al presidente de la Junta, que ha conseguido cabrear incluso a Ciudadanos, que hasta ahora venía tragando carros y carretas.
Y la cosa puede que no quede ahí, ya que el bloque de oposición baraja la posibilidad de presentar en las Cortes una iniciativa conjunta instando a la Junta a que se persone en la causa judicial abierta por un Juzgado de Valladolid en relación con la Perla Negra y los terrenos de Portillo. Dicha personación fue ofrecida hace meses por el Juzgado y la Fiscalía, sin que el gobierno Herrera la haya hecho efectiva hasta el momento, algo inexplicable cuando lo que se investiga judicialmente es un cuantioso perjuicio a las arcas de la comunidad.
Y puede darse por descontado que la oposición no se andará ya con remilgos y, llegado el momento, no dudará un instante en solicitar la comparecencia del presidente de la Junta, burgalés para mas señas, ante la comisión parlamentaria que investiga el descomunal sobrecoste del Hospital de Burgos.