Somos una comunidad afortunada teniendo una quincena de espacios protegidos entre los que destaca la parte que corresponde a parque nacional de Picos de Europa, regional como Gredos y reservas como Villafáfila, espacio RAMSAR con sus lagunas salinas endorreicas.
El miércoles visitamos con nuestros alumnos de uso público de ciclo de grado medio y superior del centro integrado de formación profesional Lorenzo Milani, Castronuño que es el único espacio protegido de la provincia de Valladolid, que en esto no es la capital y las lagunas de Villafáfila en la provincia de Zamora, restos del mar salado que hubo hace unos cincuenta millones de años.
Entre los dos espacios vimos unas treinta y ocho especies distintas de aves. En el primer espacio destacaron los cormoranes, las garzas reales, garcetas grandes, aguiluchos laguneros, etc. Árboles de ribera como el aliso o los chopos agujereados por los picos picapinos. También vimos el observatorio sobre el río inclinado por una tormenta y que aconsejamos que no lo quiten como tienen pensado, que vean que la Torre de Pisa o el campanario de la catedral de Salamanca también están inclinados.
En Villafáfila nos hacemos eco del cambio climático o como mínimo del Niño que hace que el cálido invierno haga que los gansos pasen de quince mil a cinco mil para pasar el invierno y en cinco años como esto siga así ni bajarán. Se quedan por ejemplo en Holanda donde parece que había unos cuatrocientos mil que están dando buena cuenta de los bulbos y entran hasta en jardines particulares. Estas aves monógamas que se orientan con su bulbo raquídeo por el magnetismo de la Tierra y los adultos enseñan el camino a los jóvenes, alternan con tarros, zampullines, fochas, porrones y sobre todo con un ave esteparia espectacular y en este caso polígama como la avutarda. Las vimos muy cerca con los prismáticos porque había nueve que estaban criadas desde huevos que habían traído los agricultores al encontrárselos al cosechar. No era época de la rueda que hacen los machos para impresionar a las hembras en primavera.
Con nuestros alumnos recorremos estos espacios naturales al igual que hemos ido a Arribes, Batuecas, Gredos, Béjar, ? Creemos que estudiando la Naturaleza hay que conocerla y experimentarla in situ.
También fuimos a Monfragüe en Extremadura y siendo parque nacional nos decepcionó un poco al tener un audiovisual estropeado durante los últimos años y una de las guías con bastante apatía y poca formación. Al contrario de Cristina en Castronuño y Pepe en Villafáfila que demostraron una gran profesionalidad e interés por el aprendizaje y motivación de los alumnos. Nuestros alumnos no vieron tigres, leones o dragones, pero espero aprendieran a observar lo fino y profundo de los singulares ecosistemas que nos rodean, para disfrutarlos y respetarlos.