OPINIóN
Actualizado 19/01/2016
El Topillo

El pasado fin de semana se difundían los primeros sondeos electorales sobre intención de voto ante el eventual escenario de que haya que repetir elecciones generales. Y los resultados eran los que se preveían: el PP subiría a costa de Ciudadanos y el PSOE se vería rebasado por Podemos.

Aunque Pedro Sánchez lo está disimulando muy bien, está claro que a los socialistas no les interesa para nada una nueva convocatoria electoral, que, en su caso, se vería precedida además por unas primarias para elegir de nuevo a su candidato/a a la Presidencia del Gobierno, amén de un Congreso Federal. Ciudadanos no se esfuerza en disimularlo: Después de haber enseñado ostensiblemente la patita, Albert Rivera sabe que ni por asomo iba a volver a contar con 40 diputados.

Ni que decir tiene que a todos los diputados y senadores elegidos el pasado 20-D, sin excepción alguna, les da repelús pensar en tener que someterse de nuevo a las urnas. Incluso a los que saben que, salvo cataclismo, volverían a renovar su preciada acta parlamentaria. No les cuento aquellos otros que primero tienen que volver a ganarse el puesto en la lista y que, caso de que lo consigan, corren el riesgo de no ser reelegidos y pasar a la historia como los parlamentarios más efímeros de la democracia española.

Póngase usted en el caso por ejemplo del diputado de Ciudadanos por Salamanca, Pablo Yáñez, que ha saltado al escaño del Congreso desde su puesto de contratado a dedo (personal eventual de confianza) al servicio de la única representante de su partido en la Diputación de Valladolid. ¿A dónde iría si Ciudadanos cubre dicha vacante con otro esforzado compañero de partido?

Hablando de vacantes, ahí ha quedado la de coordinadora contra la Violencia sobre la Mujer en la Delegación de Gobierno, ese puesto de libre designación que se agenció en su momento la ahora senadora por Zamora,Clara San Damián. Es de esperar que la Delegada, María José Salgueiro, proceda de inmediato a su cobertura. Sería demasiado fuerte que dicha vacante permaneciera sin cubrir a la espera de que se despeje el panorama, no ya para San Damián, que lo tiene despejadísimo, sino para la anterior titular del puesto, Rosa Urbón, quien lo dejó al ser nombrada directora general del Instituto de la Mujer. Cosas mas difíciles se han visto.(Continuará)

Leer comentarios
  1. >SALAMANCArtv AL DÍA - Noticias de Salamanca
  2. >Opinión
  3. >Previsibles efectos de una nueva convocatoria electoral