OPINIóN
Actualizado 18/01/2016
Marta Maruenda

Está más que comprobado. No todo el mundo es altamente creativo, no todos podemos escribir un best seller, dibujar a las mil maravillas, crear poemas únicos o componer canciones exitosas. Al mismo tiempo, no todo el mundo tiene la suerte de saber resolver problemas complejos, o encontrar soluciones para enfermedades tras larga dedicación y precisión en cada uno de los pasos de una investigación.

Sin embargo todos poseemos creatividad que se dejará ver en mayor o menor medida según se trabaje, entrene, enfoque o module.

Todos hemos tenido, tenemos o tendremos grandes ideas, ideas mediocres o malas ideas; pero desde luego nunca nos visitan cuando las necesitamos. Las ideas magníficas no surgen ante la primera página de un cuaderno impoluto que reza "ideas" en su título, ni de la mano de una pluma estilográfica sentados en un lugar cómodo, luminoso y con las mejores vistas.

Lo más bonito viene entre risas, de lo natural, cuando estás haciendo algo totalmente opuesto a la idea que surge, mientras corres o conduces, cuando estás de todo menos inspirado, de la conversación con un niño, mientras cocinas o comes. Se presentan cuando no tienes nada de nada a mano para apuntar, mientras estás intentando dormir y no puedes, y juras que mañana recordarás esa idea pero siempre se marcha al olvido.

Las mejores historias caben en servilletas y vienen de un boli que al principio no escribía, y tras tu persistencia y garabateo, consigue enunciar el inicio de algo grande, tan grande como tú quieras.

Nunca tengas papel y boli a mano, ahí nacerán las mejores ideas y te las sabrás ingeniar para apuntarlas.

Feliz semana y... ¡a quererse mucho!

Etiquetas

Leer comentarios
  1. >SALAMANCArtv AL DÍA - Noticias de Salamanca
  2. >Opinión
  3. >Donde la inspiración te encuentre