No recuerdo cuando le conocí, ni cómo, ni por qué, solo sé que me encandilaron sus ojos, que en mi adolescencia bailé su "let's dance", su "blue jeans", su "modern love", su "little china girl" su "ashes to ashes"? hasta caer rendida, que canté mil veces, su "under pressure", con el otro grande, el grandísimo Freddy Mercury, que grité al viento su "dancing in the street" con Mick Jagger, que aún hoy me sigue emocionando hasta la médula su "tonight" con Tina Turner,? que su "space oddity" se convirtió en una de mis canciones preferidas de todos los tiempos?
Cuando yo le conocí ya no era Ziggy Stardust, ni el rey del glam, ni el androgen symbol? pero toda su leyenda le rodeaba como un halo de magia y misterio, de snobismo y extravagancia, de GLAMOUR musical en mayúsculas, que me hizo intuir, aún en mi ignorancia, que no era un músico más, que era un grande.
Luego, con el tiempo, cuando poco a poco fui descubriendo "live on mars?", "changes", "heroes"? ya no me quedó duda de que era un grande.
Hace unos meses oí que iba a sacar un nuevo disco y lo esperé con la ilusión de alguien que reencuentra a un amigo del instituto. Es una pena que la alegría haya durado solo tres días.
Gracias, David Robert Jones, por todo lo que nos diste. Afortunadamente hoy puedo tenerte a un golpe de click, otra vez en mi casa, cada vez que te eche de menos.