OPINIóN
Actualizado 13/12/2015
Rebeca Martín

A veces la realidad nos golpea en la cara y nos hacemos muchas preguntas pero no encontramos las respuestas. Nos pasa a los adultos y les pasa a los niños también. Los niños, con su ingenuidad y su inocencia, esperan recibir siempre una  respuesta que les calme y les alivie, pero no siempre sabemos cuál es la más adecuada, la más tranquilizadora o la más real.

Como sabéís desde Unpuntocurioso nos gusta pensar que los libros nos ayudan a entender y descubrir el mundo que nos rodea, a imaginarnos mundos fantásticos cuando no nos convence del todo el que nos ha tocado y a estar informados para ser críticos y ayudar a mejorar la realidad que nos golpea. Por eso hoy nos parecía interesante incluir algunas recomendaciones de lecturas a través de las cuales, cuando uno se hace una pregunta, podemos compartir una respuesta. Todas tienen un nexo común: las imágenes de Serge Bloch, un dibujante francés cuyas ilustraciones se caracterizan por un trazo sencillo, casi infantil, como monigotes llenos de humor. A veces sus dibujos se insertan en retazos de fotografías, escenas reales en un mundo a veces duro, o simplemente muy humano.

Con El Hilo de la Vida  (Davide Cali/ Serge Bloch. Ediciones B, 2006) el lector descubre que todo lo que vivimos está conectado por un hilo rojo que nos acompaña desde el nacimiento hasta la muerte, y nos permite, de forma sutil, disfrutar de grandes momentos como esperar un beso antes de dormir, encontrar el amor, perderlo?

Con ¡Violencia, no! (Dominique de Saint Mars/ Serge Bloch. San Pablo, 2005) el lector parte de las situaciones más frecuentes en las que se producen estos comportamientos y la obra explica de modo comprensible sus causas (rechazo,falta de respeto, celos,culpabilidad...) además de ofrecer consejos para reaccionar ante los mismos.

Con El enemigo (Davide Cali/ Serge Bloch. SM, 2008) el lector descifra un interesante alegato contra la guerra, mientras se va preguntando quién es el enemigo en realidad, para terminar descubriendo que acabas enfrentándote a alguien que podrías ser tu mismo, aunque te hayas dado cuenta tarde.

Con ¿Qué son los sentimientos? (Oscar Brenifier/ Serge Bloch. Edebé, 2006) el autor, Oscar Brenifier, comparte su idea de que los niños deben ser estimulados y aprender a hacerse preguntas desde pequeños para ser más libres y desarrollar sus pensamientos. Y es que en sus propias palabras "preguntar debe ser como un ejercicio físico; para los adultos es muy común invitar a un niño a participar en un equipo de fútbol o a practicar cualquier otro deporte, porque consideran que es importante que se ejerciten, pero hay que hacer algo para que se eduquen y desarrollen el pensamiento"

Os invitamos hoy, un día tan bueno como otro cualquiera, a compartir preguntas y respuestas con los más pequeños, para ayudarles a entender el mundo que nos rodea y a descubrir la importancia del finísimo hilo de la vida que nos une a todos, de alguna u otra manera. 

Rebeca Martín.

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