Lugar del último atropello en la Avenida de Saavedra y Fajardo. Este es el paso de peatones legal, pero quien acude desde el Barrio de la Vega lo hace por el semáforo que asoma a la derecha de la foto, donde no hay paso.
Esta semana parece que han resurgido con fuerza los atropellos, que nunca nos han abandonado, alcanzando también a ciclistas. Hace 100 semanas que empecé a escribir esta columna, centrada fundamentalmente en movilidad urbana y transportes, pero sin abandonar otros temas de la realidad que nos rodea. Al cabo del tiempo curiosamente vuelvo a hablar de los problemas de las personas cuando caminan por la ciudad para realizar sus actividades, como comprar.
Los medios de comunicación recogieron hace unos días un atropello en la Avenida de Saavedra y Fajardo, en el cruce junto a la Guardia Civil donde se encuentra con la Avenida de Carlos I y la Calle del Pico del Moncayo, donde hay una entrada a un supermercado. Es indudable que estos establecimientos atraen numerosas personas para realizar sus compras, cuidar la seguridad de sus accesos, sobre todo si estos incluyen cruzar calzadas (lo que es habitual) parece necesario. Conviene resaltar que muchos medios señalaron que la persona cruzaba por un lugar indebido, algo que no es tan habitual que se haga en caso contrario.
Las noticias se suele dar de forma fría, sin analizar si el diseño del cruce semaforizado, o la falta de un paso de peatones en un lugar, es adecuado o no. En ese sitio hay semáforos y también un paso de peatones, pero la pura observación nos indica que la solución adoptada por el Ayuntamiento no es precisamente adecuada. Dejando al margen que los tiempos de espera en semáforos penalizan a los peatones, muchas veces los lugares para cruzar no están en el sitio adecuado y lógico, por lo que nadie se puede sorprender que se tienda a seguir un camino más lógico pero menos seguro a pesar del peligro que pueda representar.
El camino más lógico desde la Avenida de Carlos I, pero no tiene paso de peatones en nngún lado. Observese a una persona al fondo esperando para cruzar.
Como se puede observar en la foto superior, desde donde se ha hecho esta (junto a la entrada del Cuartel de la Guardia Civil) cruzar caminando la calle hasta la esquina del Supermercado supone 38 metros de distancia. Hacerlo por el paso de peatones legal supone 100 metros. Distancia que "aumenta" si encima se llevan bolsas de la compra. Desconozco los razonamientos técnicos que han llevado al Ayuntamiento para situar el paso de peatones donde lo han hecho, pero parece que es una mala decisión. No sé a cuantos atropellos esperan para corregirlo, no es la primera vez que denuncio esta situación.
El paso de peatones queda delante del primer coche parado precisamente ante él. Se puede obserbar el rodeo que hay que dar.
Recordemos que hace no mucho tiempo, en aras de "aumentar" la seguridad vial se suprimió otro paso de peatones junto a un supermercado en la Avenida de Portugal. La reacción de la gente ha sido rodear las vallas que se pusieron, con lo que el problema no sólo no ha desaparecido sino que se ha vuelto más peligroso.
Observese la casi nula visibilidad de su izquierda que tiene un vehículo desde la Calle del Pico del Moncayo para acceder al Camino de Miranda. A nadie se le ha ocurrido poner un espejo enfrente.
El supermercado del Teso de la Feria del último atropello acumula más problemas. Los coches que abandonan la Calle del Pico del Moncayo hacia el Camino de Miranda, única posibilidad al ser estrecha y de dirección única, no tienen visión de los vehículos que puedan venir por su izquierda al cambiar de calle. Supongo que el presupuesto municipal no da para colocar un espejo enfrente para que el cruce sea más seguro. Y las personas que acudan al supermercado desde el Barrio del Zurguén se encuentran que el paso de peatones para cruzar la Calle de Dos Encinas no está en el lugar adecuado. No hay que trasladarlo, se utiliza para acudir al colegio, sencillamente hay que colocar otro pensando en que la mayoría circula justamente por donde no hay paso de peatones.
Aunqeu no se ve muy bien, en la acera de la derecha al fondo está el supermercado, junto al cartel blanco que se ve al final del puente. Falta un paso de peatones en la calle del primer plano a la derecha.
Tengo la pesada y aburrida costumbre de recordar que sólo el 23% de los viajes en la ciudad se realizan en coche, según el Plan de Movilidad, y más del 60% caminando. ¿Por qué se sigue pensando y diseñando Salamanca desde la perspectiva del coche?, ¿tanto tira el vehículo oficial?. En democracia, ¿no gobierna la mayoría?