Ayer mi amigo Juan me preguntaba: ¿Dónde están los refugiados? Llegando a la siguiente conclusión: Y es que de pronto los refugiados desaparecen, y si antes estaban y ahora no, solo existen dos razones, una, que ya no están en los campos de refugiados y se han vuelto a su país, o porque ya no sirven como propaganda.
Sabemos que siguen en esos campos marginados, y vejados, por lo que solo nos queda la segunda opción, la de haber sido utilizados como propaganda.
Hace tan solo unos días, no muchos, si, ¿Por qué ahora no?
Y Juan me comentaba, que el mundo está lleno de buenas personas, que de vez en cuando sale alguno malo, y que no es fácil de entender pero que es así.
Sabemos de siempre que el medio social influye para lo bueno y para lo malo, y es así en muchos casos, aunque algunos lleven guardada en sus genes la semilla del mal, por lo que el medio social intente atemperarla.
Sabemos que el ser humano es bueno y cuando veíamos por todas las televisiones ese éxodo masivo de refugiados, se nos encogía el corazón al ver las imágenes desgarradoras, causando gran indignación, con un bombardeo continuo de todos los medios, era muy doloroso ver la imagen del niño Aylan Kurdi ahogado el esa playa turca, y de paso nos hacían observar quien era el culpable de tanto dolor, "el Gobierno Sirio".
Ya se había urdido todo el plan, los refugiados, y todo el pueblo europeo conmovido e indignado, y un culpable: "El Gobierno sirio", solo quedaba la intervención militar en Siria con la comprensión de todo el mundo.
Cuando está todo montado, es Rusia quien entra en escena, ayudando al Gobierno Sirio, frente al Estado Islámico y los grupos de oposición (Al Qaeda con su rama en Siria, Al Nusra), siendo los no yihadistas los armados hasta los dientes, por Occidente y USA.
Así que adiós al petróleo, a las materias primas, a las riquezas de Siria, pues con Rusia en escena ya no se puede intervenir, ya no hay nada que hacer, no ha servido para nada el señuelo de los refugiados.
Siempre es igual, cada vez que se quiere intervenir un Estado, se monta primero la estrategia que justifique dicha invasión, aún resuenan en mis oídos las palabras del que fuera presidente de España el Sr. Aznar, tratando de justificar la invasión de Irak, cuando decía, "Crean me, les estoy diciendo la verdad, hay armas de destrucción masiva".
Nos hemos dado cuenta, se ha destapando la trama de estos buitres carroñeros y depredadores del petróleo las materias primas la venta de armas y también nos hemos dado cuenta de que ya no se habla de los refugiados.
¿Qué ha pasado con esas cadenas de TV y con esos corresponsales?, ¿con esos campos de refugiados?, pues mire usted, han desaparecido.
Andrés Barés Calama