Un análisis resalta que el segundo trimestre del año fue positivo en la mayor parte de indicadores acompañada por la bajada de combustibles
Las cifras y los indicadores tienen ahora una tendencia positiva en la economía de Castilla y León y Colegio de Economistas de Valladolid (Ecova) barrunta una nueva fase de crecimiento para Castilla y León, un incremento además que califican de moderado y sostenido, precisamente el que se considera más adecuado, ya que cuando a las grandes aceleraciones suelenn sucedelas los ajustes. Los expertos auguran así una fase continuada en la que, eso sí, se observa una posible dificultad, sobre todo en el futuro, el progresivo envejecimiento de la población de la comunidad autónoma, detectado, sobre todo, porque la edad media de los trabajadores, aumenta. Un aviso para que el presidente del colegio, Juan Carlos de Margarida, ha dejado caer en la presentación de los datos, por si los políticos deciden adoptar acciones para intentar atajar esta amenaza.
La economía de Castilla y León registrará un crecimiento moderado en lo que queda de año y en 2016, según las estimaciones del V estudio elaborado por el Observatorio Económico del Colegio de Economistas de Valladolid (Ecova). «Es evidente que ha crecido la confianza del consumidor, lo que deriva en un mayor gasto y, por consiguiente, en un crecimiento sostenido de la economía», ha explicado De Margarida.
Las previsiones de crecimiento vienen acompañadas de una caída de los precios del petroleo, de manera que a en los dos primeros trimestres de 2015 se observan menores costes para las empresas y mayor gasto de los consumidores. «La mejora económica, tanto en España como en Castilla y León, ha venido acompañada por la positiva política expansiva del Banco Central Europeo a través de la compra de activos, el mantenimiento de unos intereses en mínimos históricos y de medidas para contener la inflación», ha enumerado el presidente del Colegio de Economistas.
Repunte industrial
«El crecimiento interno y la demanda en Castilla y León han aumentado en el segundo trimestre por estos motivos. Europa marca las directrices con sus políticas y eso influye en el repunte industrial. Poco a poco se restaura la confianza del ahorrador, además de recuperarse progresivamente el nivel de renta de las familias dada la mayor creación de empleo y la reducción desde el Gobierno de la carga impositiva», ha expuesto De Margarida.
El mercado del trabajo tambien observa «una mejoría lenta» y por ello ha entendido como necesario que baje la cifra de desempleados. «Castilla y León debe repuntar en este aspecto», ha dicho y ha recordado como entre los 2010 y 2014 desaparecieron en la comunidad 9.499 empresas, mientras que en los seis primeros meses de 2015 se crearon 1.646, el 1,03 % más que en el mismo periodo del pasado año. «La tendencia se frena, pero resulta preocupante que el 93% tienen menos de cinco trabajadores y hay pocas con más de 500 empleados», ha declarado.
Las distintas políticas de empleo puestas en marcha por la Junta de Castilla y León destinadas al colectivo joven estarían dando sus frutos en los últimos meses, ha destacado Juan Carlos de Margarida, quien se ha felicitado del hecho de que los jóvenes de entre 20 y 24 años cuentan ahora con más posibilidades para quedarse en su tierra.
En su comparecencia para dar detalles del análisis económico elaborado por Ecova respecto de la evolución de la economía de Castilla y León entre abril y junio, De Margarida ha puesto incidido en el incremento del empleo experimentado por este colectivo, del 10% sobre el primer trimestre, «lo que significa que las políticas en la materia están dando sus frutos y que los estudiantes empiezan a encontrar trabajo en Castilla y León, cuando hasta ahora se veían obligados a marcharse a otras comunidades autónomas», ha manifestado.
Trabajo para los jóvenes
El presidente de los economistas vallisoletanos ha puesto como ejemplo de la reactivación del mercado laboral el descenso del 8% registrado en los parados sin empleo anterior o los que se hallaban en el desempleo por tiempo superior a un año, «lo que supone que hay mayores expectativas para los jóvenes de esta comunidad», ha razonado.
Los sectores servicios, industria y sobre todo en construcción, que empieza a mostrar una sensible recuperación, son los principales demandantes de este empleo joven, y todo en un proceso en el que Castilla y León experimenta un crecimiento moderado de su economía con buenas perspectivas para lo que queda del año y el ejercicio de 2016, «ya que se prevé contar con más renta disponible y un reforzamiento de la demanda interna ayudado por la ausencia de presiones inflacionistas y el mantenimiento de unos tipos bajos de interés», ha argmentado, entre otros muchos factores.
En el lado negativo, De Margarida ha sido el crecimiento del colectivo de mayores de 55 años, que aumentó el 2,57% en el segundo trimestre, frente al 1,64 del periodo enero-marzo, «y esto constituye un serio problema de envejecimiento de la población que obliga a estudiar las políticas demográficas de la región», ha alertado el economista, quien entiende que el mejor antídoto es «crear industria para atraer a gente de fuera y evitar que los de aquí se marchen a otras comunidades».
Población inactiva
También preocupa el elevado porcentaje de la población inactiva que no produce, en concreto 947.900 personas (el 39% de la población de Castilla y León), de ellas 133.800 estudiantes, que crecen el 3,53%, junto con jubilados y discapacitados, que representan el 60% del total de inactivos y que, en opinión de De Margarida, «suponen un importante coste social para esta comunidad autónoma».
La alta temporalidad de los contratos laborales, el aumento de la deuda pública la Administración regional, del 190% desde 2009, aunque figure ésta entre las menos endeudadas, así como de las empresas públicas, con incrementos del 3,40% y 4,83% interanual y trimestral, respectivamente, y la contracción de los depósitos y créditos financieros figuran igualmente en el 'debe' del informe de los economistas vallisoletanos.
El responsable del Ecova ha recordado que las previsiones de crecimiento del PIB regional lo sitúan a final del año en el 3%, fruto de la fortaleza de la demanda interna, y ha subrayado que la buena marcha de la economía lo constatan los 939.300 ocupados en Castilla y León, con un incremento de 25.600 activos respecto del primer trimestre, del 2,85% y del 2,31% desde el punto de vista trimestral e interanual, respectivamente, así como el crecimiento de la tasa de empleo (2,8% trimestral y 2,9% interanual) y la reducción de la tasa de desempleo, del 18,49%, lo que sitúa a la comunidad, con un total de 189.311 parados, entre las que experimentaron una mayor reducción.
Entre los motivos de esa recuperación, De Margarida sitúa el incremento en lo que va de año de los contratos indefinidos, sobre todo en la industria; el impulso al espíritu emprendedor con la creación de nuevas empresas, en concreto 1.646 en estos primeros seis meses, la mayoría de ellas microempresas de menos de cinco trabajadores; el aumento de la licitación oficial, cifrado en 280 millones (200 licitados por la Administración central, 51 por la local y 28 por la regional); las matriculaciones de turismos, camiones y tractores, con incrementos mensuales del 15, 62 y 36%, respectivamente, e interanuales del 300% y 130% en el caso de los segundos y terceros, así como la mejora de la confianza tanto de empresarios como consumidores y el aumento de las exportaciones, con 1.388 millones en junio, el 7,64% más que en marzo.
Buena evolución del turismo
El análisis incluye entre los aspectos positivos el del turismo, que si bien disminuye en términos interanualesm crece trimestralmente en establecimientos, plazas ofertadas y personal empleado. De Margarida ha precisado en este sentido que el sector ha experimentado un reajusteque ha provocado la desaparición de empresas poco rentables, al tiempo que ha incidido en el trabajo que queda por hacer para incrementar el porcentaje de turistas extranjeros, toda vez que el 77% del total sigue siendo nacional.
El Observatorio Económico de Castilla y León incluye también como factores de desarrollo positivos de la Comunidad los incrementos experimentados en el sector del transporte de mercancías por carretera y vía aérea.
Fuente: El Norte de Castilla