LUMBRALES | En la zona de entrada al casco urbano, los erales intentaron dar la vuelta en el recorrido y obligó a uno de los caballistas a intervenir
Susto para uno de los caballistas participantes en el último encierro de las fiestas de Lumbrales, evento en el que se corrían cuatro novillos de Aldeanueva, y que como días anteriores congregó a miles de personas en el recorrido y en la plaza.
El momento de mayor emoción en este encierro llegaba a la entrada del casco urbano de Lumbrales, cuando los novillos habían sacado cierta ventaja a mansos y cabalistas, lo que les dio tiempo a pensar y pararse. Fue entonces cuando varios de los erales intentaron darse la vuelta y obligó a actuar a uno de los jinetes. Esto motivó instantes de peligro, al menos para el caballo, que estuvo a punto de ser corneado, aunque felizmente todo quedó en el lance.
A partir de ese momento el encierro discurrió sin incidentes hasta la entrada en el coso de la manada y posteriormente en toriles, quedando así dispuestos para el espectáculo de recortes previsto para esta tarde. Tras el desencierro de los mansos se procedió a dar suelta a tres vaquillas para disfrute de los aficionados.
Para esta tarde, además del festejo de recortes, está previsto un Gran Prix de peñas con la lidia de varias vacas. Además, organizado por las peñas, a partir de las 22.30 horas tendrá lugar una macrofiesta para pequeños y mayores, evento que dará paso a concursos de baile, mucha música, y que concluirá con la discomóvil Arte para despedir las fiestas.
FOTOS: INFOTUR