Cada día monto en mi bicicleta, una BH de color verde pálido, sin guardabarros traseros y con un solo freno.
Me gustan los senderos tranquilos en los que se escucha el beso entre la rueda y la tierra, a veces el silencio es total, nada escucho, y se hace largo el camino.
Mi cadencia es pausada, me adelantan como si alguien quisiera llegar antes que yo, me hago preguntas que no encuentran respuestas.
Me dan miedo las bajadas pronunciadas, hay puertos largos y empinados en los que me bajo y ando. Sigo en mi bicicleta, es única, auténtica; sigo solo. El viento me acaricia, los maizales me regalan sus sinfonías, los riachuelos me apasionan y sonrío.
En ocasiones tormentas y truenos despiadados me dan miedo y pedaleo con todas mis fuerzas hasta caer exhausto, estoy entumecido, empapado, tengo escalofríos, mi ropa ajada, me doy cuenta; mis pies desnudos.
Mi bicicleta verde se mueve, no descanso, ¡tanto por descubrir! voy solo y el mundo gira, me miran raro los niños negros porque soy blanco.
No tengo hora, lo tengo todo, me dicen que tengo una discapacidad.
Sigo en mi bicicleta, es única, auténtica, ¿alguien me acompaña?
A mi "primo" Chuchi y su familia ?