Los Gastrobares se han instalado en nuestro país hace varios años poniendo de moda una nueva manera de entender la gastronomía. Es evidente que el mundo de la hostelería también tiene su transformación y evolución, sobre todo en momentos de crisis, donde la imaginación se agudiza propiciando la presentación de nuevas tendencias culinarias. La denominación de Gastrobar se emplea para describir a un bar-restaurante que intenta acercar la buena cocina a todo el público con precios asequibles, sin la formalidad de un restaurante y con la informalidad y agilidad de un bar con buena calidad. Pero como todo lo que se pone de moda, hay que tener precaución de no ser engañados, pues algunos establecimientos abusan de la denominación de Gastrobar para vender cualquier cosa envuelta en teatralidad y timo.
Para la gente que no ha descubierto los Gastrobares y quiere platos y tapas creativas con productos de calidad, acompañadas de un buen vino o cerveza, deben de acudir a conocerlos, Salamanca tiene varios y con buena calidad, pero yo me atrevo a aconsejarles DIABLURAS, que está en la Calle Asadería, 4 (subiendo la escalera de la riojana en la Gran Vía) un local muy agradable con una fachada impresionante de azulejos y con una agradable terraza. Les atenderá Natividad Pérez, trabajadora infatigable, en un ambiente familiar y profesional como pocos. Experiencia no le falta, viene de buena escuela. Después de dejar la cocina del famoso restaurante Víctor Gutiérrez, se embarco hace cuatro años en este estupendo Gastrobar que ha trasladado del Pozo Amarillo a la calle Asadería para que el público pueda acomodarse en más espacio y seguir disfrutando de una excelente, variada y cambiante carta de tapas y platos, que en muchas ocasiones se actualiza con productos de temporada. Cocina de autora, bien elaborada. Cada tapa o plato es una creación que lleva tiempo y dedicación primando la calidad y garantizando la originalidad a un precio muy asequible. La elección de pedir es muy personal pero podemos elegir, entre otras cosa, su Foie oporto mango, Vieira con guisantes, Arroz cremoso con setas, Lechazo charro confitado ó los postres de Milhojas, Texturas de chocolate, Torrijas caramelizadas, etc etc. Todo lo convierte en un placer para los sentidos.
Diabluras es un establecimiento, cien por cien salmantino y una opción más que interesante y apetecible en nuestra ciudad para conocerlo. Podemos disfrutarlo durante todo el año, pero en verano, donde los encuentros con amigos y familiares son más frecuentes, se convierte en un lugar indispensable para disfrutar su terraza.