A veces la tecnología asusta y nos hace pensar dónde están los límites. Quizá no haya límites.
Esa es mi conclusión tras ver los avances que se están llevando a cabo mediante la novedosa impresión en 3D. Todo lo que pueda salir de una de esas impresoras nos va a parecer fascinante. De momento parece que hay una competición por ver quién es el primero en imprimir algo de todo.
Son asombrosos los estudios que se están llevando a cabo en base a la impresión en 3D de órganos humanos o parte de ellos. Algo que, de funcionar como se espera, puede ser la salvación de muchísimas personas que esperan un donante.
En cuanto a la música, el violinista francés, Laurent Bernadac ha sido el primero en construir un violín impreso en 3D, el cual, según explica, ha sido ideado por él mismo mediante la técnica de lápiz y papel, eso sí, luego tuvo que llevarlo a un ordenador para que todo saliera como es debido.
Para este proyecto que le ha llevado tres años, pensó en los componentes de su instrumento perfecto y de ahí salió el "3Dvarius", inspirado en el modelo real de 1653, de la familia del italiano Antonio Stradivari, y que seguro va a ser un buen negocio.
Como digo: clásico pero moderno.
Os dejo el enlace al video para que escuchéis cómo suena este violín eléctrico.