Virgen

Todas las culturas han demostrado un interés por aquellas personas que con la capacidad reproductora renunciaron a ella o a los placeres del coito. En algunas de esas culturas la mujer virgen fue icono de virtudes humanas, naturales y sobrenaturales. En este sentido no nos son extrañas, ni sorprendentes. Más en la actual civilización occidental ser virgen por voluntad propia representa para muchos un fenómeno incomprensible. Genera incomprensión; "No lo entiendo" dicen sorprendidos la mayoría.

Como la necesidad de entenderlo todo se ha vuelto el credo oficial del hombre y la mujer occidental, lo que entiendo tiene derecho a existir, lo que no entiendo no tiene derecho a existir. Dicho de otro, la incomprensión genera rechazo, exclusión y, en suma, discriminación. En parte por ello fue necesario que surgiera la tolerancia, lo que nuestros abuelos denominaban respeto y que los cristianos engloban dentro de la caridad, con el fin de que lo que no comprendo lo pueda tolerar, sin más, sin ir más allá, es decir, tolero que existas, o mejor dicho, "existes porque te tolero". De esta manera de pensar surge la intolerancia o la tolerancia a todo cuanto nos rodea.

Con respecto a la virginidad voluntaria y consciente surge entonces la tolerancia o la intolerancia en la sociedad occidental, pues existen  hombres y mujeres vírgenes de manera temporal o indefinida que provocan en el resto admiración, rechazo, desdén o indiferencia.

La virginidad ha generado una creencia social y cultural bastante arraigada y que consiste en la incredulidad de que sea consciente y voluntaria. Es decir, según esta creencia, todos cuantos se declaran vírgenes de manera voluntaria no son conscientes, de alguna manera sus capacidades volitivas y cognitivas están mermadas o son presas de un fanatismo sectario. La relación de la virginidad con la religión y las sectas ha generado un asentimiento firme de esta creencia, extendida y consolidada en la sociedad occidental. Si nos guiamos por la página de sucesos de los noticieros puede parecer que así es, pero la realidad silenciosa y profunda de la historia, la que no sale en los telediarios es muy diferente y a poco que uno se interese por el tema e investigue, rápidamente tomará conciencia de que la creencia se basa en una maniobra de la mente que como siempre, generaliza, tergiversa y omite sobre los datos reales.

Optar en la vida por la virginidad de manera temporal o indefinida es una opción de vida que durante la historia han practicado miles de personas. En el siglo XX con la Declaración de los Derechos Humanos se comenzó a conformar un "corpus" normativo, conformado de principios y creencias, de los que la libertad sexual forma parte y en el que se encuadró desde el principio la virginidad, siendo estudiada y observada junto con la promiscuidad sexual o el comercio sexual. Es decir la virginidad nace en el siglo XX asociada a la parte negativa de la libertad sexual, a todo el conjunto de fenómenos excluidos de lo que podemos denominar "una vida sexual sana y racional".

Como podemos observar será la racionalidad la que determine la bondad de las actitudes humanas. Lo que se hace con una sentencia: "No es normal". Ser virgen no es normal tenga la edad que tengas, es el fallo de esta sentencia inapelable de la sociedad. Eres tachado de "anormal" si optas por la virginidad.

Comienza entonces la aplicación del fallo y la pena impuesta que no es otra que la incomprensión, la intolerancia. Y comienza la sensación en la persona virgen de que existe porque le dejan existir. Toleramos su existencia, pero no entendemos su estilo de vida, su actitud y su elección.

En nuestra sociedad actual la pena de incomprensión es el resultado de haber otorgado el poder a la mente y su poder racional. Como en nuestra historia pasada llenas de "sanbenito"i], en la actual seguimos estigmatizando todo lo que no entendemos con la sentencia de: "No es normal".

En la historia del mundo occidental está la VIRGEN MARIA, madre de Jesús de Nazaret. Tal vez una de las figuras femeninas más representadas por el arte en todas sus formas y estilos. El 15 de agosto celebra la Iglesia Católica su ascensión a los Cielos en cuerpo y alma, lo que se denomina "LA ASUNCION", que para los católicos romanos es dogma de fe desde el año 1950, si bien se celebra en su historia desde el siglo VII. Hoy estarán en fiestas muchos pueblos en España.

La virginidad voluntaria y consciente, una de las decisiones más controvertidas para el hombre y la mujer en la sociedad actual. Y una asignatura pendiente para la sociedad que no pasa de la tolerancia a la aceptación.

¿Y usted, tolera o acepta?