CANTALPINO | Al final del día se concentran tranquilas en lo alto de la Iglesia (GALERÍA DE FOTOS)
Desde sus nidos de retamas, las cigüeñas nos miran absortas con toda la serenidad de quien acaricia cada día el cielo. La luna bendice el atardecer rojizo. Las golondrinas dibujan garabatos alrededor del campanario. Es verano y el aire de Cantalpino está encantado. (Jclp)