Todos sabemos que las promesas electorales, una vez pasadas las elecciones, muchas de ellas quedan en el olvido; en cualquier caso, estaremos muy atentos y vigilantes observando si nuestros representantes cumplen con lo prometido en lo que se refiere a la
Juan L. Hernández (activista de Amnistía Internacional Salamanca)
Amnistía Internacional de Salamanca siendo consciente de la excepcional importancia de las elecciones que acabamos de celebrar decidió mantener contactos con la mayoría de los principales partidos y agrupaciones políticas que se han presentado a las mismas para tratar de que éstos pudieran introducir en sus programas electorales algunas propuestas referentes a la difusión y defensa de los Derechos Humanos. Estos contactos se llevaron a cabo con el PP, PSOE, IU, UPyD, Ciudadanos, Podemos, Vecinos por Salamanca y también con representantes del gobierno de la corporación ahora en funciones. Todos ellos sin excepción las acogieron de buen grado y en algún caso con gran entusiasmo. No solamente las han considerado razonables sino también del todo asumibles. En realidad no podríamos esperar otra cosa ya que entendemos que vivimos en una sociedad democrática y que nuestros sucesivos gobiernos han firmado y ratificado las obligaciones internacionales que el Estado ha contraído en materia de los Derechos Humanos. Ahora bien a la hora de ponerlas negro sobre blanco en sus programas electorales prácticamente ninguno las ha incluido, lo que tampoco quiere decir que no tengan la intención de cumplirlas.
La grave crisis económica que llevamos padeciendo desde hace ya algunos años, crisis económica que en realidad se ha ido transformado en una crisis de derechos humanos y aunque a pesar de hay quien nos la quiere presentar como ya superada (alguien dijo en el furor de un mitin electoral:¿quién habla ya del paro?) y que la mayoría de la ciudadanía considera que en absoluto se puede hablar tan ligeramente de este tema, que se lo pregunten si no a los más de cinco millones de parados, a los empleados en precario, a los desahuciados de sus viviendas, al deterioro de la sanidad y la educación pública, a los niños en situación de pobreza, a los inmigrantes agredidos o expulsados en caliente, etcétera, etcétera, etcétera.
Sería fundamental que los futuros representantes en los ayuntamientos de nuestros pueblos y ciudades pudieran y debieran comprometerse a incluir expresamente algunas prioridades en materia de Derechos Humanos en su gestión de gobierno a lo largo de la siguiente legislatura con el fin de contribuir en su promoción y defensa.
Estos últimos días inmersos como estamos en una vorágine político-mediática, haciéndose pronósticos sobre como quedarán configurados los ayuntamientos y las diputaciones, qué apoyos recibirán unas u otras fuerzas, pactos que se negocian por un lado y se descalifican por otro y en los que algunos candidatos parece que están más pendientes de conseguir llegar al poder o mantenerse en él cueste lo que cueste más que mirar por el bien de sus conciudadanos/as. Lo relevante es que el Ayuntamiento como institución de gobierno y administración local más cercana al ciudadano es quién, por obligación, tiene que atender y dar respuestas a sus necesidades.
En cualquier caso, éstas son, resumidas, las propuestas presentadas:
Propuesta sobre derechos humanos a nivel municipal que presenta AI Salamanca a partidos y agrupaciones electorales.
Más detalladamente se puede ver la posición de Amnistía Internacional visitando este enlace https://www.es.amnesty.org/noticias/noticias/articulo/donde-estan-los-derechos-humanos-en-las-elecciones-municipales-y-autonomicas/
Como he dicho, estas propuestas fueron muy bien recibidas y de ser concretadas no cabe duda que darían un plus de en prestigio a nuestra ciudad y por supuesto sería un referente para otras puesto que la situaría en la vanguardia de la defensa de los Derechos Humanos. Todos sabemos que las promesas electorales una vez pasadas las elecciones, muchas de ellas quedan en el olvido, en cualquier caso, estaremos muy atentos y vigilantes observando si nuestros representantes cumplen con lo prometido en lo que se refiere a la defensa, protección y difusión de los Derechos Humanos y si no es así lo denunciaremos públicamente como es nuestra obligación y nuestro deber como activistas de Amnistía Internacional.