Los directivos del BBVA se quitan la corbata con la banca digital. Leo la noticia en la última columna de la primera página de un periódico. Como si a los directivos de los bancos les diese vergüenza quitarse la corbata. Pero no hay más remedio, avanza mucho la tecnología y los tiempos. Hay que ponerse al día. Estamos en tiempos de cambio. Para que no digan que no estamos a la altura de los políticos melenudos y con coleta. Ya lo dice un político nuevo: ha llegado el cambio, hasta en la manera de vestir y presentarse. Así se tarda menos, no hay que hacerse el nudo, ni siquiera hay que abrocharse todos los botones.
Hay que ser un hombre de la calle. Y dicen los del BBVA que la corbata, el quitársela, tiene relación con la banca digital, supongo que quieren decir con la ampliación del negocio por medio de las redes, por donde corre ya el dinero virtual, que ellos se embolsan realmente. Y con tanto ajetreo en las redes hay que aflojarse el nudo o tirar la corbata en la primera silla que encuentres. Lo que no sabemos es si los bancos y sus directivos cambiarán en alguna otra cosa o seguirán ganando dinero a expuestas como ahora a pesar de eso que llaman los recortes y la crisis, que parece que a ellos no les afecta. Y que se debe en gran parte a que ellos tienen sueldos de infarto y con este reparto unos poquitos se hacen más ricos y muchos, muchísimos, más pobres. Decía un tertuliano que no importa que los banqueros cobraran tanto si los de abajo ganan lo suficiente para vivir. Pero yo creo que si los de arriba se llevan esas buenas tajadas no queda casi nada para los que no tienen nada. Y eso es lo que está pasando: los ricos cada vez más ricos y los pobres cada vez más pobres. El capitalismo se quita la corbata, como antes se había quitado la chistera y la pajarita y se ha quedado en "neocapitalismo" de cara lavada, y ahora sin corbata. Pero es el mismo, tan injusto como siempre.