OPINIóN
Actualizado 09/06/2015
Cipriano Pablos

Llega la hora de la verdad. Después de exigirse unos a otros trasparencia, a pocos días de que se constituyan las corporaciones locales y los Gobiernos autonómicos, los ciudadanos andamos confundidos esperando  saber a qué conclusiones han llegado unos con otros y otros contra unos.

Como suele ser habitual, todos se han vuelto muy exigentes con los contrarios, más de lo que son consigo mismos. Nos van a sobrar regeneradores. Las imposiciones al contrario son tajantes, pero se pueden hacer excepciones, ya lo verán.

Estos días se empieza a vislumbrar el estacazo que les puede esperar a algunos en las generales, porque pagarán caro lo que ahora van a hacer  o dejar de hacer, según dónde. Rehuyo citar nombres, "porque todos son iguales, pájaros y pardales" ( expresión muy recurrida por mi madre ).

Es cierto que al partido mayoritariamente gobernante hoy, le ha caido encima la pesada losa de la corrupción y esto parece haber hecho que algunos olviden lo que tienen en su propia casa. Recomienda un proverbio chino darse tres vueltas por la propia casa, antes de intentar limpiar la ajena.  Alguno, muy novato todavía, saca pecho y arenga con una falta de la más elemental vergüenza, como si él y los suyos estuvieran inmaculados.  Pero fomentar las fobias por el contario siempre suele dar resultados. Otra cosa es lo que duren.

Se me antoja que todos vamos a pagar un precio significativo: algún partido por jugar a doble campo, lo que descoloca a sus votantes y todos, en general, por la desconfianza que se puede generar en los inversionistas, que crean riqueza y dan trabajo, lo que más necesitamos hoy.

A esperar unos días más y que Dios nos pille confesados. Les llega la hora de dar trigo y ya veremos cuántos y cuánto pueden. De palabras estamos servidos.

Etiquetas

Leer comentarios
  1. >SALAMANCArtv AL DÍA - Noticias de Salamanca
  2. >Opinión
  3. > El precio de los pactos