Afortunadamente la vida me ha dejado viajar, conocer diferentes culturas y países. Y en todos, absolutamente en todos, su himno y su bandera son sagrados, respetados, amados y disfrutados cuando toman cuerpo sus notas musicales o florecen los colores que los representan.
Después de lo expuesto, permítanme que no pueda entender la polémica del himno y la pitada infame (desde mi punto de vista) con la que fue rechazado.
Oigo exponer ideas y me quedo atónito:
"Estamos en democracia " .... Ah, yo pensé que la falta de respeto no era democracia, era mala educación.
"Libertad de expresión " ....¿pero tú libertad no termina donde empieza la mía? ¿consentirías el mismo hecho si fuera la revés?
"Es un grito contra los políticos" ... Y los que no lo somos y de una forma u otra nos afecta, donde se deja el respeto a mi libertad...
"Yo no soy español"... ¿Qué pone en tu DNI? ¿Por qué te beneficias de mis impuestos? ¿por qué respetas el himno de Venezuela o de Australia? Si es por educación, por favor continúa con ella cuando suene mi himno o pase mi bandera.
O el culmen de la tontería, "no es nuestra competición" ¿por qué la juegas y la utilizas para llegar a Europa y con ello conseguir más dinero? ¿por qué aceptas las prebendas económicas generadas de alguna forma por la federación española? Podía dar soluciones a ello pero caería en su mismo error de falta de respeto.
¿Saben? No sólo faltan al respeto las dos aficiones que se encontraban en el campo el día de marras, hay otros muchos que lo hacen diariamente sin ir a estadios ni eventos, cuando te miran y juzgan por exponer un logo representativo de la bandera de mi país, cuando se atreven a calificar a su portador, cuando condenan su uso y se vanaglorian de llevar en su pecho banderas de otros países ya sea en camisetas deportivas o de otra índole. Aún no se han enterado que la bandera y el himno español cubre toda la piel de toro, que bajo sus colores se abrigan derechas, izquierdas, más derechas o más izquierdas, abstenidos y sostenidos y muchos, muchos mantenidos .
¿Saben? Somos unos estúpidos Quijotes sin la realidad que le daba Sancho. Somos unos lerdos que solo ante la victoria (casi siempre deportiva) y en los momentos de euforia nos vestimos de rojo y gualda y subimos el volumen de nuestro himno como si fuera un hit parade, unos ingratos que mordemos la mano que nos da de comer y a la que aportamos nuestro esfuerzo para ello, unos "ajusticiadores" que se dedican a juzgar en vez de sumar, unos veletas sin ideas propias teledirigidos por pajaritos que susurran al oído, independencias dependientes, políticas cuarteadas, orgullos malentendidos y memorias históricas sin depurar.
¿Saben? Por esa cantidad de mejunjes y condimentos ya se nos agrio nuestra sociedad, ya nos llevó a un lastre histórico que , por lo visto, no hemos superado.