Uno de los dos ediles socialistas electos habría mostrado ya su total disposición a dar su apoyo a un acuerdo con 'Vecinos por Macotera' para la formación de un nuevo gobierno
Partido Popular y Partido Socialista han escenificado en la tarde-noche de este jueves sus diferencias irreconciliables de cara a un acuerdo que haría posible la investidura de un alcalde del PP, lo que supondría para esta formación la perdida de uno de sus bastiones históricos en la comarca.
Según ha podido conocer SALAMANCArtv AL DÍA y BRACAMONTE AL DÍA, ambas formaciones han mantenido hoy una reunión en la que dejaban patentes sus posturas y reivindicaciones de cara a un posible pacto de investidura para el próximo día 13. Tras horas de conversaciones y desavenencias, el encuentro terminaba con una rotunda negativa de los socialistas a tender la mano a cualquier acuerdo. Las causas: las propuestas que los populares habrían puesto sobre la mesa para lograrlo.
Tal y como ha podido conocer este diario, el PP ofrecería la posibilidad de integrar al PSOE en las comisiones organizativas del Consistorio, exponiendo lo delicado del nuevo escenario de gobierno y solicitándoles apoyo decisivo en temas puntuales.
Por su parte, fuentes del Partido Socialista declaran mostrarse totalmente en contra de acceder a cualquiera de las propuestas presentadas por el grupo popular, dejando -por otro lado- la puerta abierta a un pacto definitivo con la agrupación 'Vecinos por Macotera'. De producirse este acuerdo, sumarian fuerzas y conseguirían mayoría absoluta con cinco ediles, pero otorgarían el sillón de regidor de la villa al líder de esta nueva formación ciudadana, Francisco Blázquez.
Lo que ya es una realidad es la determinación de uno de los dos concejales electos socialistas, quien ya habría depositado el voto positivo a Vecinos para ejecutar el acuerdo por lo que la decisión final quedaría ahora en manos del otro edil del PSOE que se encuentra hospitalizado y aún mantiene en duda su decisión. Por parte de la nueva formación, esta mantiene su total disponibilidad a dialogar para lograr configurar la nueva Corporación, algo para lo que resta poco más de una semana.