¡Cómo no¡ Una vez mas desde la calle el ciudadano opina y da en el clavo. Ellos no han cursado ningún master en la Economical School of London. Ellos no son "politólogos", ni han leído a Marx o Keynes, a Krugman o Friedman. Ellos sólo saben de su economía doméstica, de su minúscula economía que no llega, en muchos casos, ni para llenar el depósito de su utilitario. Y poco más. No se asusten, nada de ensalzar aquí, a lo Rousseau, la intrínseca bondad del "buen salvaje", nada de "populismos", nada de las mayorías silenciosas que se quedan en casa viendo por la tele al Real Madrid (equipo intercambiable). Esas gentes siempre tan alabadas por nuestros gobernantes de turno. Nada que comentar, insisto, acerca de esos "ciudadanos honrados", esas "personas de bien" los cuales, al igual que en los tiempos de nuestro siempre recordado Caudillo, no se metían en política. De esos que en los presentes lo hacen, ¡sí¡, pero apenas un día cada cuatro años. ¡No¡ A esa generación no me refiero. Me refiero a los otros, a los hijos de aquellos, incluso a sus nietos. A los nietos y a los hijos de los que se metían, cincuenta o sesenta años atrás, en unos vagones de madera con sus maletas de cartón, sus tortillas de patatas y su analfabetismo a cuestas rumbo a Suiza, a Bélgica o Alemania. Me refiero a estas otras generaciones de jóvenes, y ya no tan jóvenes, que hoy ya saben... Igual la mayoría de ellos saben, decía, poco acerca de ingenierías financieras, pero muy bien lo que se oculta detrás de ellas. Con certero y fundado conocimiento saben. Saben que detrás de las "leyes del mercado", de los recortes del gasto social, de las privatizaciones, del pago inexorable de la deuda, lo que hay es muy simple: vosotros a sobrevivir y nosotros, que además somos poquitos, a vivir. Saben también, que sus políticos de turno, hace tiempo, dejaron de representarlos y saben que provengan del PP o del PSOE ambos llegarán a un acuerdo antes o después de las próximas elecciones generales. Estos hijos y nietos de aquellos, para desgracia de los de siempre, saben mucho más de lo que sabían sus padres y abuelos. Y tienen menos miedo del que tenían sus padres y abuelos. Saben que si un día aquellos otros les "pasaron", si lo hacen bien, esos hoy "no pasarán". Seamos sensatos: al menos no nos "pasarán" tantísimo....
PD ¡Ojo¡ En absoluto denigro al votante de a pié del PP o del PSOE o del partido que sea. Sí, en cambio, de esos de "siempre" de los que compran y se dejan comprar. De esos que para obtener alguna prebenda o puesto en la administración se ponen alguno de esos dos carnets en la boca ¡No a la excelencia, sí a la sumisión¡ A este grito de guerra, esas gentes, lo llaman "sentido común", "sentido de la realidad" e incluso "sentido de estado". Termino. ¿Quien soy yo para juzgar a nadie? Juzgar seguro que no debo, pero decidir quien se toma un rioja conmigo, seguro que sí puedo.