Razzismo

Denuncia un periódico que rebrota el fantasma del racismo como exacerbación de la raza, sentida por un grupo étnico dominante que persigue etnias consideradas inferiores por ellos, llegando a confundirse con la xenofobia que odia, repugna y hostiga a los extranjeros, aunque uno y otra vayan por caminos paralelos sembrando dolor y lágrimas a pisotones.

No se quedan los racistas en defender la existencia de diferentes razas, además se atribuyen gratuitamente la superioridad y el derecho a exterminar a los ciudadanos despreciados por ellos, sin dar explicaciones ni justificar los abusos cometidos en nombre de inexistentes derechos de fumigación.

Advertimos que no es la corrupción, ni el crimen histórico colectivo, ni la contaminación atmosférica, el deterioro del medio ambiente o los pecados capitales, las mayores vilezas cometidas por el ser humano, sino el racismo que cubre de tinieblas la Tierra como plaga bíblica enviada por pieles de color diferente a las que ellos masacran a machetazo limpio.

Epidemia que impunemente corroe el tejido humano y denigra la raza única a la que todos pertenecemos como bípedos racionales, sin que los verdugos reciban castigo alguno por burlar leyes, quebrantar declaraciones universales, doblar varas de la justicia y conculcar valores eternos que nos justifican.

Solo puede reafirmar el sentimiento de pertenencia a una tribu aquel que  mantiene su espíritu entre los dinosaurios; solo el inculto se sostiene hormigonado al primitivismo de los clanes neolíticos; solo el déspota usurpador expulsa a otros terrícolas de la Tierra que les pertenece, abanderando su etnia y atribuyéndose poderes que nadie le ha otorgado.

Oculta el racismo un odio injustificado a supuestas razas inferiores creadas por los razzistas, argumentando falsas e inexistentes razones para aniquilar otros seres humanos, que solo habitan en cerebros irracionales desestructurados, con perfiles de miseria moral, enajenación mental perpetua y escarcha en las venas.

Fotografía: Hipólito Martín