Por si nos parecía que en esta tierra nuestra la corrupción pasaba de puntillas, ahora sale el gran escándalo de las eólicas, que no es moco de pavo.
Es difícil comprender cómo las energías renovables han recibido grandes subvenciones para su montaje , el contribuyente ha visto encarecido el recibo de la luz y sin embargo luego hay dinero a manta para prebendas. Y aquí nadie sabe nada, todo se ha hecho correctamente y el Sr. Consejero de la cosa echando balones fuera.
Hace pocos años ya surgieron irregularidades con huertos solares en la Comunidad, produciéndose el cese del Delegado Territorial de Industria de Zamora, como implicado en algunas de ellas.
O sea, que aquí también cuecen habas. A ver qué papelón le toca hacer al Sr. Presidente de la Junta y cómo nos hacen digerible este escándalo.
Es llamativo lo que está ocurriendo estos días con la salida a la luz pública de casos de corrupción que afectan al PP. Lo del Sr. Rato es más que llamativo.
A estas alturas ya se nos va consumiendo la poca confianza que nos podía quedar en algunos políticos. No es posible tanto mangoneo y tanto "trinque". Y el problema de fondo, es que se resquebraja la confianza en todos, porque la tendencia es a pensar que quien no ha metido mano en la caja es porque no se la han puesto delante. Aunque es cierto que no todos lo harían, pero entre tantos, siempre puede surgir alguno, el que menos te esperas, como estamos viendo.
Calentitas se están poniendo las pre-campañas. Qué tendremos que ver y oir cuando lleguen las campañas.
Muy llamativo es, también, el proceder del PSOE, que hace bien en pedir explicaciones y que se purgue a los responsables, pero lo suyo no le va a la zaga y no terminan de actuar como deberían y como dicen que harían. Cuando les salta la liebre de su lado, esconden la cabeza e ignoran todo lo prometido. Esto no es serio, ni ejemplar, ni tolerable.
Castilla y León, tierra de sabor a qué?