OPINIóN
Actualizado 19/03/2015
José Javier Rodríguez

No solo los colonizamos y los abandonamos a su suerte ante la ocupación marroquí, sino que ahora, también, colaboramos con sus ocupantes, quienes torturan y violan sus derechos a diario...

 

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Autora: Alba Calvo

    El gobierno español está en deuda con el pueblo saharaui, y lejos de resolver su deuda, alimenta y soporta la situación de injusticia en la que se encuentra.

    Desde hace unas semanas venimos escuchando el caso de Hassanna Aalia, a quien esta vez le ha tocado sufrir la postura cómplice que el Estado Español le brinda a Marruecos. A Hassanna se le ha condenado injustamente a cadena perpetua en Marruecos, por participar en el campamento Gdeim Izik, la protesta pacífica más multitudinaria en la historia del Sáhara Occidental. El gobierno de España, como ya ha hecho en otras ocasiones, le ha denegado el asilo político. Parece que, una vez más, priman los intereses económicos que nuestro gobierno tiene con Marruecos por encima de la vida y la dignidad de las personas. Si definitivamente Hassanna es entregado a las autoridades marroquíes, España estará violando una vez más el pacto internacional, y estará enviando a Hassana a un país donde se tiene constancia de que puede ser torturado.

    Recordemos como fue tratado Ali Aarras, también condenado por las autoridades marroquíes y abandonado por las españolas. Ali fue incomunicado y torturado brutalmente tras su devolución por España en el 2010. A día de hoy sigue preso.

    En los territorios ocupados del Sáhara, las autoridades marroquíes detienen, golpean, torturan y humillan a la población saharaui a su antojo. Sin ir más lejos en el tiempo, hace unas semanas, el preso saharaui Abdul Baqi Aliyen Antahah, entre otros, falleció en una cárcel de El Aaiún, como consecuencia de malos tratos y torturas por parte del personal marroquí. Una mujer saharaui embarazada perdía a su bebé, hace unos días, a causa también de los malos tratos recibidos por las fuerzas marroquíes.

    El pasado 27 de febrero, hicieron 39 años del nacimiento de la República Árabe Saharaui Democrática, 39 años que el último soldado español abandonó la antigua colonia europea, 39 años de espera, 39 años de lucha y 39 años sin derechos para los saharauis, bajo la mirada cómplice de la ONU. ¡BASTA YA! ¿Hasta cuándo? ¿Cuántas más personas torturadas, humilladas y asesinadas hacen falta para empezar a intervenir desde los gobiernos? 

 

 

Pd: Las opiniones expresadas en este artículo son de exclusiva responsabilidad de su autora.

 

 

 

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