Con capacidad para 20 usuarios, una comenzará a funcionar el próximo mes y la segunda en 2016 (GALERÍA DE FOTOS)
Los enfermos de esclerosis múltiple de Salamanca contarán a partir del próximo mes con las primeras viviendas adaptadas de España. Junto al paseo de Los Olivos, y con capacidad para 20 personas, están destinadas a enfermos con dependencias severas, para respiro familiar o emergencias. La primera de ellas se pondrá en marcha en marzo con cinco usuarios y la segunda, a comienzos del próximo año. "A medida que se vaya equipando, llegarán más", afirmó el presidente de ASDEM, Felipe Ramos.
En un solar municipal valorado en 2,4 millones, la Asociación Salmantina de Esclerosis Múltiple (ASDEM), con la colaboración de ASPRODES, el Ayuntamiento, la Junta y el Gobierno central, ha puesto en marcha estas viviendas inteligentes que se convierten en un referente nacional para mejorar la calidad de vida de las personas dependientes.
Con una aportación municipal de 46.000 euros, el alcalde de la ciudad, Alfonso Fernández Mañueco, ha visitado hoy las instalaciones que son completamente accesibles y disponen de sistemas inteligentes que permiten controlar la luz, la temperatura, la televisión o las ventanas a través de la voz o los movimientos de los ojos desde un ordenador. También contarán con un jardín y un huerto ecológico adaptados para los enfermos de esclerosis y se convertirán en un centro de estudio e investigación.
Acompañado durante su visita por los presidentes de ASDEM, Felipe Ramos, y de ASPRODES, José Gómez, el alcalde destacó el incremento del gasto social para ayudar a los diferentes colectivos "que trabajan diariamente para mejorar la calidad de vida de las personas afectadas por algún tipo de enfermedad y a sus familias".
Un proyecto de cooperación entre entidades y administraciones, con una residencia "pionera en el apoyo a las personas, facilitando la vida diaria" por la domótica empleada y por la asistencia que recibirán los enfermos. Ramos destacó que de las 20 plazas, algunas serán de residencia y otras de respiro, para que los familiares puedan descansar en unas instalaciones cuyo presupuesto supera los 1,1 millones de euros.
Fotos: Alberto Martín