DEPORTES
Actualizado 19/01/2015
Redacción Ciudad Rodrigo

Uno de los jugadores mirobrigenses, Raúl, salió del partido con la marca de tacos de un rival en el costado

El derby de la tarde del domingo de la Regional de Aficionados entre Béjar y Ciudad Rodrigo estuvo marcado -como ya reflejábamos en la crónica del encuentro- por un ambiente ciertamente bronco.  Lamentablemente, lo allí ocurrido ha tenido consecuencias posteriores.

El manager general del Ciudad Rodrigo, Aris Marcos, ha pasado la noche del domingo al lunes ingresado en el Hospital de la Santísima Trinidad de Salamanca por culpa de un golpe en la cabeza recibido durante el encuentro, al que en principio no se quiso dar mayor bombo desde el club mirobrigense.

Concretamente, Aris Marcos fue agredido durante la celebración del segundo gol del Ciudad Rodrigo por un aficionado del Béjar que se encontraba en la grada. En el campo bejarano, los banquillos están incrustados en la parte inferior de las gradas, de tal forma que los aficionados están justo encima de los banquillos. Si sacan los pies de la barandilla, alcanzan las cabezas de los miembros del banquillo si éstos están de pie.

Tras escupir y lanzar objetos al banquillo mirobrigense durante buena parte del partido, un aficionado fue más allá, y golpeó en la cabeza a Aris Marcos. En principio, el técnico no quiso darle mayor relevancia, pero en el viaje de regreso a Ciudad Rodrigo empezó a dolerle la cabeza.

Al llegar a su casa de Miróbriga ?cerca de las 21.00 horas-, vio que tenía un bulto en la cabeza, por lo que puso rumbo hasta el Hospital de la Santísima Trinidad, donde los médicos confirmaron que sufría un traumatismo craneal, quedando ingresado en el centro médico a la espera de realizarle un escáner en la mañana del lunes.

En sus declaraciones post-partido, Aris Marcos ya dejó caer que había sufrido una agresión, aunque de forma inversa: "da gusto tener una afición así de deportiva en todo momento sin meterse con nadie ni hacer insultos graves ni racistas, y mucho menos escupir al cuerpo técnico durante todo el partido ni lanzar una patada en la cabeza a una persona del cuerpo técnico".

En la mañana del lunes, tras realizarle las pruebas programadas, Aris Marcos manifestó a Ciudad Rodrigo Al Día que estaba "bien", caminando sin problemas por el pasillo del Hospital. Tras recibir la confirmación de que sufría un pequeño traumatismo craneoencefálico, fue dado de alta. El manager general del club mirobrigense apuntó que no piensa denunciar a nadie: "en esta vida no hay que ser rencoroso", pero sí pide al Béjar que "expulse para siempre a ese aficionado".

A última hora de la mañana del lunes, el Béjar Industrial hizo público un comunicado firmado por su presidente, Ildefonso Sánchez Vicente, en el que el club bejarano expresa que en el acta arbitral no aparece ninguna agresión, y que al delegado de campo "no le consta" que hubiera ningún acto de este tipo. En su comunicado, el Béjar condena "cualquier tipo de violencia" y desea la total recuperación de Aris Marcos

Sin consecuencias tan graves, el derby frente al Béjar dejó también señales físicas en un jugador mirobrigense, Raúl. Pese a que apenas estuvo media hora sobre el terreno de juego, se fue marcado, ya que un jugador rival le pisó mientras estaba en el suelo, clavándole los tacos en el costado izquierdo, como se puede ver en la imagen superior. Precisamente, cuando Raúl iba a ser cambiado, se armó esta bronca (se puede ver en los vídeos a ras de césped y desde la grada):  

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