OPINIóN
Actualizado 22/12/2014
José Luis Zarza

Un año más las esperanzas e ilusiones de la lotería invaden nuestra cotidianidad y nos hace tener una enorme esperanza durante toda la mañana de hoy. Una vez más Loterías ha apostado por un anuncio que toca la fibra más sensible de los ciudadanos y esta vez acompañado de una consigna extraordinaria e impactante: "El mayor premio es compartirlo". Y parece que así se hizo, compartiendo el Bar La Muralla y compartiendo el error ortográfico que en el anuncio aparece: "Tres primeros y dos segundos a elejir". ¿Y por qué no?, los dueños del Bar La Muralla así lo habían escrito y así se debería mantener. Parece que hay algunas historias reales sobre el anuncio, cual es el caso de Miguel Ángel Autero y Mohamed en el que el primero guardó al segundo un premio de la lotería. Puede ser así, o no serlo, qué más da, el hecho importante del anuncio es el premio de compartir y ese premio es muy real y muy actual.

La crisis ha creado muchas necesidades sobrevenidas e inesperadas, y las familias, primero, han sabido compartir con los suyos las necesidades que éstos tenían; pero la crisis fue creciendo y ya no era posible compartir nada salvo la miseria, y los ciudadanos se volcaron con sus vecinos ayudándoles en la medida en que les era posible. Cuando la crisis golpeó sin piedad a clases sociales que jamás pensaron que ocurriría, los diferentes Banco de Alimentos hicieron están haciendo, un enorme esfuerzo para paliar en lo posible la falta de alimentación, sobre todo en los niños; y así también Caritas ayudando, además, al pago de algunas rentas en determinadas circunstancias; y la Cruz Roja, y las asociaciones de vecinos y colectivos de todo tipo cuya acción, hace unos años era impensable. Sin duda, el mayor premio es compartir todo aquello con todos aquellos que más lo necesitan.

Por eso, y porque esta mañana está llena de esperanza, ¡qué Dios reparta suerte y que podamos compartirla!.

Feliz Navidad

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