Los españoles no tenemos remedio. Una vez más nos ponemos la venda en los ojos, llenamos nuestros corazones de ira y cobardía y nos lanzamos al precipicio de la debacle.
Llevo escuchando, toda mi vida, los gritos pidiendo libertad y democracia por parte de la izquierda; por eso, cuando miro en retrospectiva todos y cada uno de los países que han estado y están gobernados bajo el color de la amapola, me pregunto si las palabras libertad y democracia tienen el mismo significado para mí que para ellos.
No concibo que un intervencionismo gubernamental sobre el individuo, tratar al que no es de su ideología como fascista, clausurar los medios de comunicación que estén en contra de ellos o meter en la cárcel al jefe de la oposición, sean paradigmas de libertad y democracia.
El Gran Wyoming comentó en un medio de comunicación, que la guerra civil española fue producida por que la derecha no ganaba las elecciones. Sé que Wyoming o personajes de su calaña, hace del arte patrimonio de la izquierda más radical (como si todos los artistas fueran "alzapuños") y camuflan sus verdaderas ideas represivas (como todos los gobiernos de izquierdas hasta la fecha) con libertad y democracia.
Cuando escucho estas falacias de personas como Wyoming y veo como suben, en intención de voto, partidos como Podemos, no puedo por menos de sentirme defraudado por mis compatriotas que, por su situación actual, creen a pies juntillas las mentiras de estos individuos, sin pararse a recapacitar de las funestas consecuencias que pueden generar con sus actos impulsivos e irreflexivos.
Para no provocar bostezos entre la concurrencia, termino con unas frases de uno de los padres del socialismo español llamado Largo Caballero. Para el que no sea muy ducho en historia, explicar que fue un sindicalista y político español, histórico dirigente del Partido Socialista Obrero Español y la UGT. Durante la Segunda República Española fue ministro de Trabajo de 1931 a 1933, y presidente del Gobierno ya durante la Guerra Civil.
"Si no nos permiten conquistar el poder con arreglo a la Constitución? tendremos que conquistarlo de otra manera".
"No creemos en la democracia como valor absoluto. Tampoco creemos en la libertad".
"Hay que apoderarse del poder político; pero la revolución se hace violentamente: luchando, y no con discursos".
"Si los socialistas son derrotados en las urnas, irán a la violencia"
Así que amigos, no se dejen engañar, que si algo nos han enseñado nuestras abuelas es que:
"De tal palo, tal astilla"