Hoy os voy a hablar de un pequeño complemento que posee la capacidad de cambiar por completo un outfit: me refiero al lazo. Es un accesorio atemporal, no envejece y cada año se reinventa con nuevos colores, materiales y posiciones.
El poder del lazo es, casi, inconmensurable es por ello que hay que saber combinarlo y buscarle un lugar adecuado en tu estilismo para que sea oportuno y "embellezca" el vestido, la chaqueta o el pantalón.
Si os gustan los lazos podéis optar por prendas que ya los lleven incorporados en el corte de la cintura, en el escote de la espalda o como adorno en el hombro o se los añadas tú como cinturón, broche o recogiendo el pelo en una coleta o un moño.
Pero siempre que penséis en llevar un lazo tened cuidado y no abuséis de ellos ya que de portar demasiados pueden parecer exagerados y rozar la cursilería y eso no lo queremos.
Der ser, como yo, unas apasionadas por los lazos lo mejor es que os hagáis con uno multitusos en un color básico como negro, blanco o rojo que podáis llevar de cinturón o utilicéis para cerrar un abrigo dándole un toque muy chic.
Aunque los lazos también pueden aparecer en cualquier zapato sin embargo, donde más lucen es en los salones o stilettos y si es en un color que contraste con el fondo del calzado, quedará perfecto.