La petición la fundamentan en que "se está realizando en vertido, depósito y abandono incontrolado de residuos mineros"
La Plataforma Stop Uranio ha denunciado a la empresa Berkeley Minera España S.A.U ante la Junta de Castilla y León, Subdelegación de Gobierno, Ministerio de Industria y el Consejo de Seguridad Nuclear por la "mala praxis" en la ejecución y restauración de sondeos de exploración de uranio y gestión de residuos radioactivos realizados en terrenos del término municipal de Retortillo, acción que desde este colectivo argumentan en "las afecciones a la radiología ambiental que supone".
En concreto, esta "mala praxis" la fundamentan en que "se está realizando un vertido, depósito y abandono incontrolado de residuos mineros" prohibido por el artículo 3.2 del R.D. 975/2009 sobre gestión de los residuos de las industrias extractivas y de protección y rehabilitación del espacio afectado por actividades mineras y que "incumple" también lo previsto en la Declaración de Impacto Ambiental de esta concesión aprobada por Orden FYM/796/2013 en cuanto a los apartados de gestión de suelos y residuos.
El Proyecto de Restauración aprobado establece que los residuos NORM y/o potencialmente generadores de ácidos se encapsularan garantizando la protección al medio ambiente, lo que en opinión de la Plataforma y que documentan con fotografías, "no se está produciendo, ya que se están realizando sondeos para uranio y se abandonan los residuos producidos por la perforación al lado del sondeo".
Este "abandono de los sondeos presuntamente incumple, entre muchas otras, normas que apuntan a que "el material del sellado debe ser impermeable (arcillas, cemento, etc.) y llenar no solo la entubación del pozo, sino también todo el espacio anular entre la misma y el terreno".
Asimismo, recuerdan que "la parte superior del pozo, hasta un mínimo de 5 metros, deberá rellenarse con hormigón, quedando el último tramo de 1 m. relleno del suelo natural", y que en lo que se refiere a la protección del sondeo, "el dispositivo de cierre deberá ser una tapa metálica con un espesor mínimo de 4 mm, soldada en todo su perímetro al tubo".
Para Stop Uranio, a la vista de las fotos realizadas por esta Plataforma en el mes de octubre del 2014, "es evidente que no se están cumpliendo las normas. Se abandonan tubos PVC que sobresalen del terreno medio metro, residuos mineros abandonados en el monte, residuos plásticos abandonados en el campo, balsas de decantación con protecciones insuficientes o deterioradas y otras balsas directamente sin protección alguna para personas y animales, y terrenos sin restaurar inundados de agua sin protecciones".
Por otro lado, también denuncian que en mediciones efectuadas en las diferentes áreas donde se han realizado sondeos "se detectaron incrementos en la radiación natural ionizante por encima de 1 mSv sobre la natural del terreno en zonas cercanas, lo que constata otro incumplimiento de la normativa. Todo ello con implicación para las aguas superficiales que se acumulan en zonas no restauradas o de escorrentía que circulan entre dichos residuos, y que también afectan a las aguas subterráneas".
Ante estos hechos, Stop Uranio ha solicitado a los organismos regionales y nacionales el inicio de una investigación, la paralización preventiva de los trabajos y la apertura de un expediente sancionador.