O los armarios que los hay por toda la ciudad a centenares, pero para muestra basta un botón y aquí tienen los graffiteros unos lugares idóneos donde plasmar y dar rienda suelta a su imaginación; a la magnífica iniciativa de Zoes, de Inmaculada Cid y su gente, con su arte callejero, ha respondido el Ayuntamiento con un proyecto para decorar a lo largo y ancho de Salamanca muros y tapias. Nos alegra el buen rollo y que nuestros munícipes sean sensibles al trabajo de las asociaciones vecinales, que existen muchas y buenas. Además de embellecer la ciudad y suprimir porquería, tal vez consigamos que tanto 'bandarria' como anda suelto por ahí se avergüence, le entre sana envidia y trate de esforzarse para no ser un simple pintamonas, gamberro, embadurnador y tonto de capirote.