BÉJAR | Dentro de la peluquería, la imagen podría tratarse de cómica, si no fuera porque no podían abrir la puerta por miedo a que la presumida ratita se metiera dentro y les pidiera que le pusieran un lacito rosa en su colita
Ayer a las nueve y media de la noche, en la Calle Mayor de Béjar, una ratita o más bien "rataza", paseaba junto a los vecinos, compartiendo espacio y establecimientos. Primero en la puerta de una peluquería y después visitó la tienda de ropa que se encontraba al lado, donde se acurrucó, suponemos que a esperar que los asustados viandantes dejaran de fijarse en ella.
Los vecinos y paseantes congregados entorno a la rata, comentaron que es habitual encontrarlas en la céntrica calle y que el Ayuntamiento, y concretamente el departamento de Medio Ambiente, debería tomar nota, pues no sólo ellos están conviviendo con tan indeseados vecinos, sino que si la imagen que ofrece la ciudad a los que nos visitan es el atractivo turístico de pasear junto a estos animalitos, habría que ofertarlo en los folletos turísticos.