Habrá que preguntarse si les engañan o es que prefieren sentirse engañados. ¡Ya está bien de hacer el necio! Los separatistas de uno u otro color, se haga lo que se haga y se les de lo que se les de, siempre estarán disconformes y su egoísmo e insolidaridad nunca se verán saciados.
Los que cantaban la Internacional y, en su tiempo, pensaron cambiar el mundo, ahora ideológicamente no llegan más allá de su propio ombligo y con juegos de distracción caminan hombro con hombro con esta gente antisocial, con los que están consiguiendo distraer las energías que son necesarias para intentar atajar el gran problema nacional; los millones de parados y personas que están sufriendo penuria y en algunos casos hasta hambre.
Quienes por conseguir mejor parte de la tarta, acusaban de que España les robaba, ahora se empiezan a enterar que la cueva de Alibaba la tenían a la puerta de casa y el que estaba a la cabeza de los cuarenta, era el Padre de la Patria.
Ya está bien de volver con la monserga del Estado Federal. ¡Vaya perdida de tiempo¡ Quien es capaz de explicar los cambios que se tienen que hacer con respecto al Estado de las Autonomías para que esa gente, separatista, egoísta y antisocial, quedara satisfecha.
El problema precisamente ha venido por el exceso de competencias transferidas y la permisión que se ha tenido con el incumplimiento de las leyes.
Es hora de despertar del letargo y poner las cosas en su sitio. Todo ese compadreo para poder gobernar con unos o con otros, nos ha llevado donde estamos. ¡Basta ya¡ La mayor parte de los españoles estamos hartos de esta pérdida de tiempo; queremos que se gobierne pensando lo que la mayoría necesita y no en una minoría separatista quiere.
Hay quien se empeña en competir por la política populista y demagógica; es de esperar que el tiempo y la mayoría silenciosa, que en España existe, lo mismo que en Irlanda, pongan a cada uno en el lugar que se merecen.