El presidente de Iberdrola señala que es imprescindible una nueva política energética común, con cuatro pilares: más Europa, más mercado, mayor estabilidad y mayor visión de largo plazo
Ignacio Galán, presidente de Iberdrola, ha abogado hoy por la creación de una Unión Europea de la Energía, en línea con lo apuntado recientemente por el nuevo presidente de la Comisión Europea, Jean Claude Juncker, como una de las reformas estructurales pendientes clave de cara a mejorar la competitividad industrial del viejo continente.
En el transcurso de su intervención en el XIX Foro España-Estados Unidos, que se está celebrando en Marbella hasta el domingo y que ha sido inaugurado por los Reyes Don Felipe y Doña Letizia, Galán ha asegurado que para lograrlo es imprescindible la creación de una nueva política común, basada en cuatro pilares: más Europa, más mercado, mayor estabilidad y mayor visión de largo plazo.
En este sentido, el presidente de Iberdrola ha señalado que la Unión Europea requiere un marco normativo predecible y armónico, así como la constitución de un regulador único que vele por el cumplimiento homogéneo de la normativa en todos los Estados Miembros.
Se trata, según ha relatado, de propuestas que los grupos Magritte -que engloba a las 10 principales eléctricas europeas- o European Roundtable -en la que figuran las 50 mayores compañías industriales-, en los que está presente Iberdrola, ya han planteado a los líderes de la UE y de diversos países.
Ignacio Galán ha resaltado que el gran problema que padece el sistema energético europeo es el coste, muy elevado respecto al de Estados Unidos, que ha centrado en los últimos años todos los esfuerzos en su contención de cara a potenciar la competitividad de su industria. En esta línea, ha puesto de manifiesto que en Europa se debería: por un lado, eliminar de las tarifas aquellos conceptos que nada tienen que ver con el servicio -como impuestos, tasas y obligaciones varias- y por otro, crearse un sistema de apoyo a las energías renovables neutral por tecnologías, lo que favorecería el crecimiento de las más maduras.
Como ejemplo, Galán ha afirmado que, mientras un hogar medio de Estados Unidos para alrededor de 12 centavos de dólar por kWh consumido, uno europeo paga dos veces y media más, unos 28 centavos. Y ha explicado que los costes ajenos al suministro explican 10 de los 16 centavos de diferencia, muy por encima de los 5 centavos que supone el menor coste de generación en EEUU, fruto del shale gas.
Asimismo, y de cara a mejorar la seguridad del suministro en Europa, así como para disminuir su dependencia energética, el presidente de Iberdrola ha asegurado que hay que fomentar la construcción de nuevas interconexiones; maximizar la utilización de los activos existentes; retribuir adecuadamente la capacidad de respaldo que el incremento de las fuentes renovables y promover las inversiones para introducir las nuevas tecnologías inteligentes a las redes de distribución.
Por último, y desde el punto de vista de la sostenibilidad medioambiental, Ignacio Galán ha dicho que es esencial racionalizar la normativa de lucha contra el cambio climático, apostando por la reducción de emisiones como objetivo clave, para lo cual es fundamental que el mercado de emisiones funcione correctamente.
Iberdrola invertirá 10.000 millones de dólares en Estados Unidos hasta 2020
Ignacio Galán también ha aprovechado el encuentro para destacar el compromiso de Iberdrola a largo plazo con Estados Unidos, país en el que la inversión anual de los últimos años ha superado los 1.000 millones de dólares y donde prevé seguir creciendo mediante que inversiones que podrían alcanzar, a nivel orgánico, los 10.000 millones de dólares hasta 2020.
Iberdrola, que opera en la actualidad en 24 estados, cuenta en el país con 5.000 empleados que gestionan 30.000 millones de dólares en activos, cifra que representa el 25% del total del Grupo.
La compañía, a través de Iberdrola USA, lleva a cabo actividades de generación, tradicional y renovable, distribución de electricidad y gas y almacenamiento de gas:
En el primer ámbito, Iberdrola se ha convertido en el segundo operador eólico del país, con una cuota del 10% y casi 6.000 megavatios repartidos por más de 20 estados.
En redes, la empresa distribuye electricidad y gas en los estados de Nueva York y Maine y está creciendo con fuerza en el sector del transporte de energía. De hecho, en 2015 estará plenamente operativo el MPRP (Maine Power Reliability Program), que ha supuesto una inversión de 1.400 millones de dólares y servirá para reforzar la interconexión de Estados Unidos con Canadá. Iberdrola también dispone de almacenamientos subterráneo s de gas, sobre todo en Nuevo México y Texas.