Esta firma de abogados nació hace más de 10 años y está especializada en Propiedad Industrial e Intelectual
La Fundación General es un instrumento que sirve a la Universidad de Salamanca para canalizar, potenciar y mejorar sus relaciones con el entorno empresarial, institucional y social. Fue concebida en 1998 como un organismo orientado al cumplimiento de los fines de la USAL para promover las relaciones Universidad-Empresa, contribuir a la formación cultural y profesional de los titulados universitarios, desarrollar cursos de postgrado y actividades de formación continua especializada, divulgar el conocimiento científico y técnico y detectar las necesidades de I+D+i.
En este marco, nació Empresas Amigas de la USAL, como iniciativa conjunta de la Fundación General y empresas del entorno que incorporaban entre sus fines el generar valor para la Universidad de Salamanca y la sociedad. "Creemos en un modelo de trabajo abierto y horizontal como fórmula para desarrollar las iniciativas empresariales que surgen dentro de nuestra red y para potenciar los proyectos individuales de cada socio que se correspondan con la misión del grupo de Empresas Amigas".
Ahora se suma a la lista de Empresas Amigas de la USAL la firma de abogados García Domínguez y Asociados, que nació hace más de 10 años con el reto de lograr consolidar en Salamanca un despacho profesional que prestara servicios especializados en materia de Propiedad Industrial e Intelectual.
En materia de propiedad industrial lleva todo tipo de trámites y gestiones relativos al registro y consecución de patentes, marcas y diseños industriales ya sea a nivel nacional, comunitario e internacional. Además, esta la labor registral se complementa con servicios de calidad ante los Tribunales en la defensa de derechos en esta materia o extrajudiciales.
Este tipo de servicios tan especializados suelen centralizarse en las principales ciudades españolas como Madrid y Barcelona. De hecho, en su origen, el despacho fue la delegación territorial de una de las grandes agencias de la propiedad industrial a nivel nacional con oficinas centrales en Madrid.
Seguramente, son dos los principales factores que en su día propiciaron el nacimiento de una firma autónoma y con marca propia, y que siguen estando muy presentes en la día a día del despacho.
El primero de ellos, es la profesionalidad con el que los integrantes del despacho se acercan a estas materias tan específicas, pero tan extraordinariamente complejas. Este conocimiento pormenorizado de las áreas de trabajo del despacho requiere una formación muy especializada y continuada en el tiempo, ya que se trata de materias que están en constante evolución, principalmente provocada por el avance de las nuevas tecnologías, así como por el desarrollo de la normativa y jurisprudencia nacional, comunitaria e internacional.
El segundo de los factores que en su día facilitó el nacimiento del despacho y que sigue estando muy presente es el de la implementación de las nuevas tecnologías en la gestión del despacho, tanto como medio para mantener el contacto con clientes de todos los lugares del mundo, como verdadero soporte para la prestación de diversos servicios del despacho.