Las tecnologías de la información y la comunicación (TICs) se denominan con el acrónimo TICs y se han convertido a gran velocidad y de forma global en parte importante de nuestras vidas. Entre las TICs se encuentra especialmente Internet que constituye una herramienta para la accesibilidad a la información tanto para usuarios como para profesionales. La diferencia entre unos y otros es que los segundos tienen conocimientos y criterios para saber si lo que allí se vierte, se aconseja y/o recomienda tiene rigor y validez o por el contrario puede provocar daño o efectos adversos perjudiciales y debe ser desechado.
El empleo de las TICs para acceder a información sobre Salud es, hoy día, una necesidad para muchos usuarios de Internet, convirtiéndose en un instrumento fundamental en la "adquisición de información y en la transmisión del conocimiento" en Salud. En este ámbito, en 2010, el 49% de la población de la Unión Europea utilizó Internet para conseguir información relacionada con la Salud, mientras que en España fue del 53%. Tasa por cien que sitúa a España en la zona media de la Unión Europea.
La preocupación de los profesionales sanitarios por la Calidad de la información en Internet ha sido una constante desde los orígenes de esta nueva tecnología y, en este sentido, es importante destacar la escasez de evidencias científicas sobre la relación entre la información sobre Salud disponible en Internet y su impacto negativo en la Salud de sus usuarios.
El Riesgo de la utilización de Internet por los usuarios/pacientes es la Seguridad para el usuario y/o Paciente de la información que reciben y si es de suficiente calidad para seguirla como consejo o recomendación o matizarla o rechazarla. Las dudas sobre la calidad de la información suministrada online vienen dadas por la falta de control sobre el rigor científico en todo tipo de consultas, lo que puede ocasionar daño. Porque como refiere el primer aforismo hipocrático, ante todo que no exista daño o efecto nocivo (Primun Non Nocere). Por ello, como toda fuente de información para que suponga ventajas y comporte beneficios a sus usuarios, las páginas webs han de cumplir una serie de requisitos o estándares de calidad que dan lugar a una acreditación o sello de calidad emitido por organismos específicos y que asegura unos niveles mínimos de credibilidad, rigor y garantía de ausencia de conflicto de intereses.
Por otra parte, la necesidad actual de que el paciente cambie su rol, de paciente pasivo a activo, y que esto suponga una mayor participación en el proceso de Salud-enfermedad, posibilita la participación real y su responsabilidad en la toma de decisiones en relación con la gestión de su proceso patológico y, en lo que es más importante, en la posibilidad de generar Salud mediante un estilo de vida saludable y con menor riesgo de enfermar. En este proceso las TICs pueden jugar un papel relevante dado que posibilitan la sensibilización y la generalización de actividades asociadas a la Salud y reducen y evitan aquellas actuaciones personales y grupales que conllevan Riesgo y mayores posibilidades de enfermar y/o tener lesiones y accidentes. Aspecto que mejorará la efectividad profesional y la sostenibilidad del Sistema Sanitario español.
JAMCA