Hasta entonces se reforzará la vigilancia para evitar que personas no autorizadas accedan a las instalaciones
El Ayuntamiento de Salamanca instará a la Junta de Compensación a agilizar el derribo del antiguo Mercasalamanca. Esto se realizará cumpliendo escrupulosamente con la normativa vigente y la gestión de residuos. El motivo de la solicitud es adecentar lo antes posible la superficie, que cuenta con 35.000 metros cuadrados.
De cualquier modo, hasta que llegue el momento se aumentarán las medidas de seguridad en el edificio para frenar la entrada de personas no autorizadas. El derribo ya está aprobado y tendrá un coste de 420.000 euros más IVA, pero depende de una empresa acreditada y que cumpla todas las necesidades.
La empresa que resulte adjudicataria deberá redactar el proyecto para demoler esta infraestructura y realizar el estudio de gestión de residuos para llevar a cabo la demolición de las antiguas naves.