Me han llamado la atención dos portadas de periódicos que han aparecido en estos últimos días en ABC: la de García Márquez y la de Tito Villanova. Parece ser que los periódicos ponen en primera página la fotografía de un personaje o de alguien que quieren que sea un personaje. Y yo creo que con frecuencia lo consiguen. Porque mucha gente que sólo lo conoce porque ha salido en los periódicos lo considera un personaje. De Tito Vilanova ya nadie se acordaba, quiero decir la gente, hasta que ha aparecido de nuevo en los periódicos porque ha muerto de cáncer a los 42 años, y el suceso lo han dado todos los medios de comunicación y su fotografía en la primera página de algunos periódicos. Hace unos días murió, también de cáncer, a los 87 años García Márquez y su fotografía salió en la primera página de ABC. y de otros muchos periódicos del mundo. A este no hacia falta que su muerte lo pusiera en el candelero, en las primeras páginas. Porque hay muchos millones de seres humanos que han leído Cien años de Soledad y muchos tienen alguno de sus libros en su biblioteca. Mi duda está en si los periódicos hablan y ponen la foto de personajes o de los que pretenden que sean personajes. Y mi pregunta es esta: si se puede ser personaje por haber sido futbolista en el Celta o en el Elche y entrenador en el Barcelona. Y si es necesario morir joven y de cáncer, después de haber luchado contra él durante algún tiempo. Pero resulta que mueren muchos futbolistas y otros deportistas, de cáncer o de otra enfermedad, y otras muchas personas de otras profesiones mueren jóvenes y de cáncer y no salen en la portada de los periódicos. Pero si ha salido será porque era mediático, o por lo menos lo es desde ahora. Total que este mirador provinciano no se aclara, porque unos salen en los periódicos y otros no. De los que salen en los periódicos después de morir, se dice generalmente que era muy buena persona y muy amigo de sus amigos y que sonreía muchas veces. Pero claro cualquier persona después de morir puede ser buena. y lo de sonreir sólo es cogerlo en los momentos que sonríe. En fin que Dios los tenga a todos en su gloria, como decían en mi pueblo.