Imaginen la escena: 25 niños-as de tres años, primero de infantil en un colegio público cualquiera. Todos sentados en círculo a primera hora de la mañana en lo que llaman asamblea y cada niño cuenta lo que quiere, lo que le ha ocurrido, ? De pronto un niño dice algo de su padre con media lengua de trapo, es uno de los que peor habla y se le pide que repita, y el niño explica que ayer papá como siempre se había equivocado por la tarde al hacer algo. La profesora les explica que los papás también se equivocan y las mamás, y los profes? Y entonces como si de un coro se tratase, todos los niños niegan con un Nooooo rotundo, no, las mamás no se equivocan nunca, los papás si. Y de ahí no se movieron, de nada sirvió que la profesora a la que ellos creen y adoran les insistiera, si algo tenían muy claro era que los papás se equivocan a menudo, pero las mamás jamás. La anécdota es absolutamente real. Cuando una amiga me contó esto que le había ocurrido en su clase me sorprendí, a estas alturas de la película parece un tema superado, padres y madres comparten idas y venidas al cole, reuniones con los profesores, y muchas tareas, ¿O no? Entonces de dónde sacan ellos que papá se equivoca?parece claro que solo puede venir de una fuente "las madres" . Empecé a preguntar a diestro y siniestro y cual fue mi sorpresa al comprobar que casi todas mis fuentes confirmaron que las madres "manipulan" (ya ven que lo pongo entre comillas con todas las prevenciones) bastante a las criaturas y muchas discuten casi todo lo que dicen en el colegio- por supuesto no todas y no siempre- y por supuesto que se puede discutir, discrepar y hablar?Aunque no delante de los niños, ellos no debería notar en ningún caso que padres y profes no están de acuerdo. Los padres parece que cumplen bastante mejor lo que dicen los profesores y siguen con un mayor rigor las indicaciones de estos ya sean que el niño tiene que ir andando, que no puede tener chupete o que se acabó el biberón, si, si, no se sorprendan estas son parte de las indicaciones que muchos profesores de infantil tienen que repetir día a día. Las madres "en general" están convencidas desde la noche de los tiempos de que mejor que ellas nadie sabe lo que conviene a su niño. Y es cierto nadie puede discutirle a la gran mayoría de las madres su dedicación, sus renuncias, su capacidad de organización, su tiempo y sus necesidades sacrificadas por el niño, su paciencia para ayudar en lo deberes, para tantas cosas que a muchos padres aún se les escapan? Pero?
Por si me quedaban dudas, a los pocos días hojeando unos libros infantiles, me di de bruces con dos, Mamá, tierno, exquisitamente ilustrado con frases en las que se dice eso que mamá es absolutamente maravillosa y por supuesto perfecta? al lado Mi papá es un desastre, el libro también es bonito y está muy bien ilustrado, pero leemos el texto y no podemos más que darle la razón a los niños del principio, porque papá es patoso, despistado, dormilón, olvidadizo, manazas, se equivoca a menudo, no sabe hacer casi nada? la conclusión como no podía ser de otra manera es que a pesar de ser un desastre no lo cambiaríamos por nadie. Imaginen por un minuto que se publica un libro con una mamá protagonista de estas características? Los dos libros los firman mujeres? La verdad, una pensaba que esto ya no ocurría y hoy tengo que romper una lanza o dos por todos esos padres que aguantan en silencio el sambenito de que ellos no lo hacen bien, ellos no saben, porque conozco a muchos, que lo hacen tan bien como las madres o mejor y recordar a ustedes señoras madres que hay cosas que no se dicen delante de los niños, ya se que esto suena muy antiguo, pero antes al menos había cosas que decían que los niños no deberíamos oír, porque ya me contarán de donde saca un crío de tres años que papá se equivoca a menudo, si no es de oír a su madre decirle a papá, mira que eres inútil, en el segundo cajón de la cocina te dije que estaba la aspirina infantil, por poner un ejemplo?
Todo esto dicho con el mayor de los respetos a las mamás, los papás y los profesores, es el futuro lo que tenemos entre manos, así que vamos a cuidarlo