OPINIóN
Actualizado 02/03/2014
Policarpo Díaz

Escribir sobre a Cateja no sólo es un placer, sino un honor. Lo hago para rendir homenaje y levantar acta de su exitosa última actuación, ocurrida en el Auditorio Calatrava de Salamanca el pasado viernes 14 de Febrero de 2014, trayendo a escena "La venganza de Don Mendo". Era el día de los enamorados. Confieso que estoy enamorado de estas gentes, de su proyecto, de su tierra?

Cateja es un grupo de teatro albercano, que nació hace 35 años, fruto del empeño de un buen hombre llamado Moisés Serrano, hombre de hondas inquietudes, también culturales, que supo ofrecer una plataforma para aglutinar a los jóvenes de su pueblo e iniciarles en el bello arte del teatro, por otro lado recogiendo una tradición muy viva en la Sierra de Francia en general y en la Alberca en particular.

Desde entonces hasta hoy un sinfín de obras (de todo tipo), de loas, de otros autos sacramentales como el de Reyes Magos, de Pasiones en la noche del Jueves Santo, de excursiones, de exposiciones, de visitas guiadas a lugares de arte como museos, de subidas a la Peña de Francia o a otros hermosos lugares de la Sierra de Francia o de las Hurdes.

Decir algo sobre Cateja es un honor que me llena de orgullo, porque es lo que siento al ver a este puñado de actores, amigos entrañables, que sacan tiempo para la cultura y cultura para los demás, de donde no lo tienen, porque esta gente trabaja, estudia, saca adelante proyectos familiares, laborales y académicos. Y en las noches, en las horas en las que otros se dedican a tomar copas y a montar bulla, estos amigos nuestros estudian y ensayan sus papeles, se juntan en una casa, en una plaza, en cualquier rincón y le dan duro a sus papeles.

Hablar de Cateja, como grupo de teatro y amigos de la cultura en su más amplio sentido de la palabra, es decir alto y claro que el mundo rural tiene futuro, porque tiene un presente muy rico en personas, en personas con valores, en colectivo que sabe ver más allá de sus narices y han heredado de sus mayores todo un rico patrimonio cultural que se expresa de manera privilegiada en el teatro y un teatro que siempre tiene un fin no lucrativo, es decir actúan para animar, para alegrar, para sacar sonrisas en medio de nuestra tristeza, para ayudarnos a pensar en medio de nuestra apatía, para hacernos pasar un buen rato en cualquier viernes o sábado por la noche y de paso obsequiarnos con la posibilidad de poder colaborar con la restauración de la Iglesia de su pueblo (Esta es la última aventura en la que se han embarcado)

Y es que queridos y estimados lectores, este grupo está comprometido con su pueblo, con su cultura y con su fe. Puedo decir alto y claro, -como párroco que he sido durante ocho breves años- que este colectivo siempre está al quite de las necesidades de las gentes individuales y de colectivos. Ahora ?y no es la primera vez- salen a la ayuda de la Iglesia parroquial. Antes lo hicieron con la JMJ, con la Cilla, con Haití, con una familia en apuros por un hijo enfermo, etc? Esto es Cateja. Esta es la cultura de la solidaridad. Un orgullo conocerlos y un honor escribir o hablar sobre ellos.

Leer comentarios
  1. >SALAMANCArtv AL DÍA - Noticias de Salamanca
  2. >Opinión
  3. > “Cateja, cultura y solidaridad”