Ya me lo había pedido una compañera hace unas semanas, pero después de pasar varios días esta Navidad con Miguel, mi primo político, no voy a dejar pasar la oportunidad de hablar aquí sobre la sobreprotección? que conste que pese a que lo he "amenazado" con el tema de esta semana en varias ocasiones, no tengo claro si volveremos a pasar juntos otra Navidad, o básicamente por no escucharme criticarlo, calmará sus ansias de sobreproteccionismo patológico.
Ya comenté en una ocasión, que como madre de mis hijos, me encantaría evitar que sufriesen y eliminar de su vida lo que pueda hacerles daño? una cosa es querer lo mejor para mis hijos, pero entiendo que deben caerse para aprender a levantarse? gente como "el primo Miguel" está limitando la capacidad de aprendizaje de sus propios hijos? no es la fórmula correcta.
Yo considero, y con ello no afirmo que sea la verdad absoluta, que el método ensayo-error funciona, puede que necesitemos un par de errores para darnos cuenta de que estamos haciendo algo mal (por eso de que el hombre tropieza dos veces en la misma piedra), pero funciona.
Debemos dejar que nuestros hijos pasen por todas las etapas, incluidas las dolorosas, para que aprendan a ser personas y a valorar lo que tienen, desechar lo que les es dañino y agarrarse a la vida cada día?sin hacer locuras, todos los días serian lunes y a mí me gustaría que mis hijos hicieran las mismas locuras que he hecho yo (bueno, tal vez alguna menos).
No se puede revolotear alrededor de una niña de 10 años, diciendo que no puede patinar sobre hielo porque se puede hacer daño? simplemente hay que animar desde fuera a que lo intente si desea hacerlo, porque puede hacer lo que quiera, no tiene límite, estás mandando el mensaje equivocado, estás limitando no solo su capacidad de decisión, sino también su libertad, con miedo no se es libre y a ella solo le quedará el miedo? y la vida sin libertad no tiene sentido.
Debemos dejar que los niños lloren, cuando lloran al dejarlos en la "guardería", el niño también está aprendiendo algo? aprende que las personas cuando se marchan no lo hacen para siempre? lloran porque los dejas y lloran el segundo día porque saben que te marchas y aún tienen miedo, por eso, pasados unos días dejan de llorar, porque aprenden que aunque te marchas, es solo un ratito, vuelves a buscarlo?
Hay que dejarlos crecer, cada tiempo y cada etapa debe de ser vivida. De nada nos sirve tener bebés de metro cincuenta, incapaces de hacer nada por sí mismos e incapaces de resolver cualquier tipo de conflicto sin nuestra ayuda. Con tanto poner acolchado a su alrededor, estamos consiguiendo que tengan tan blanda la cabeza que al mínimo golpe se la abren? no será la primera vez que alguna familia me pregunta si vamos a acolchar el suelo? ni la primera que yo le preguntase que tipo de suelo tienen en casa? Yo de pequeña no tenía rodillas, eran costras sobre costras, supongo que quien pregunta por el acolchado en el suelo es que no ha sido niño?
Hay que disfrutar los días no sabiendo lo que puede pasar? solo viviendo? porque si no lo intentas nunca sabrás si podrías haberlo conseguido.