La consejera de Cultura y Turismo de la Junta de Castilla y León, Alicia García, tiene claro la necesidad imperiosa que existe de atraer visitantes a la comunidad autónoma sobre todo a partir de la pérdida de pernoctaciones hoteleras contabilizadas en la región en los nueve primeros meses de este año. Datos estadísticos refieren de que mientras en el conjunto de España se produjo una caída del 0,84 por ciento respecto a 2011, en Castilla y León fue de un 8,34 por ciento.
Motivado o no por estas circunstancias, aunque la consejera prefiere manejar las cifras que hacen alusión al número de turistas internacionales recibidos y que se ha incrementado en un 10,5 por ciento, el Gobierno autonómico pretende proyectar Castilla y León en la próxima edición de la Feria Internacional del Turismo de Interior (INTUR), que se celebrará en Valladolid entre los días 21 y 24 de este mes, como "gran evento cultural en 2014" dada la cantidad de acontecimientos programados a los que se unen la gastronomía y la oferta turística.
Se dispone a hacerlo, en palabras de Alicia García, desde la vertiente de que el certamen "plasma la estrategia turística de promoción y comercialización de la Junta de Castilla y León, y como espacio de trabajo y diálogo con el sector".
Lo verdaderamente relevante, sin duda, es mantener estrategias de apoyo a un sector ?el turístico- que aspira a recuperarse una vez se aleje el temporal de la crisis económica, ésa de la que algunos ya empiezan a hablar en pasado y se las creen muy felices de cara a 2014 sólo porque España pueda abandonar el rescate europeo a finales de año.
No obstante, llama la atención que 'ilustres' como el presidente del Eurogrupo, Jeroen Dijsselbloem diga que la población española "ha pasado por momentos difíciles" pero que "sus esfuerzos serán recompensados en los próximos años", cuando los malos tiempos lejos de suavizarse cada día se agudizan más al menos en ciudades pequeñas como la nuestra. Sólo hay que darse una vuelta para constatar que el cierre de establecimientos, incluidos los del centro, es el pan nuestro de cada día.