La Junta quiere crear la marca 'Ibéricos Tierra de Sabor'

La Junta de Castilla y León pretende agrupar los productos ibéricos de la región en la marca Tierra de Sabor. Así lo ha avanzado la consejera de Agricultura y Ganadería, Silvia Clemente, en la clausura la jornada de debate sobre 'Ibérico' dentro del marco de 'AgroHorizonte 2020', que ha tenido lugar en Salamanca.

"Tenemos la DO de Guijuelo y la Marca de Garantía Ibéricos de Salamanca pero necesitamos una marca de calidad que diferencie el ibérico de Castilla y Léon y nos dé fortaleza a nivel global", explicaba Clemente para añadir que, de este modo, se podrán afrontar los "retos de comercialización en el mercado nacional e internacional".

En este sentido, argumentaba que "Tierra de Sabor es conocida por el 60 % de los consumidores nacionales y prácticamente por el 100 % de los de nuestra región". En la actualidad, hay cerca de 100 industrias del ibérico adheridas a la marca, pero el objetivo es que se una el resto.

La consejera explicaba que habría que definir el etiquetado pero que se realizará un proceso similar al que se ha llevado a cabo con el lechazo y con la leche "con unos resultados magníficos".

Impulso de la comercialización

"Tenemos que trabajar en ello y preparar una promoción nacional que hay que definir cómo se financia, porque tendrá que participar el sector y tendrá todo el apoyo de la Consejería". De cara al mercado exterior la Junta propone la formación de empresarios y el estudio de los gustos de los consumidores de otros países, para definir cómo hay que llevar el producto porque hay que adaptarlo y, por ejemplo, "no se puede llevar el jamón entero".

Fortaleza del sector

Clemente aseguraba que el Horizonte 2020 es una gran oportunidad, ya que confluyen recursos de UE y de la Junta. Además, recordaba la fortaleza de este sector en Castilla y León, que cuenta con "el mayor censo de cabezas de porcino ibérico y aquí se sacrifica el 70 % del ibérico de nuestro país y una gran parte se transforma en nuestras industrias porque son muy eficientes, han avanzado y las condiciones de curación, fundamentalmente en la provincia de Salamanca, son óptimas".

A pesar de la "crisis económica muy grave, desde 2008 a 2014, Castilla y León ha mantenido su censo de explotaciones, mientras que Andalucía ha reducido su cabaña en un 75 % y Extremadura en un 50 %", concluía.