La falta de compra anticipada, unida a la soleada jornada, desborda la Operación Bocata

La Delegación Diocesana de Manos Unidas llevó a cabo en la jornada del jueves la clásica Operación Bocata, la actividad más multitudinaria de las que desarrolla cada año la entidad en el marco de la Campaña contra el Hambre, con la que este año se ayudará a la construcción de un centro de promoción femenina en Senegal.

Desde la 9 de la mañana, un numeroso grupo de voluntarios estuvo preparando en las dependencias donde estuvo situada la Guardería Mi Otra Casa ?pertenecientes al Obispado- más de un millar de bocadillos, gracias a las donaciones efectuadas por particulares, empresas e instituciones.

Como es habitual, se prepararon bocadillos de tortilla, chorizo, salchichón, queso o sardinas, que se empezaron a repartir en la Plazuela del Buen Alcalde ?este año estuvieron aún más cerca los puntos de elaboración y de reparto- a partir de las 13.30 horas. Durante los compases iniciales del reparto recogieron su bocadillo principalmente personas mayores, y algún grupo como los usuarios de Asprodes.

El volumen de público en la Plazuela aumentó a partir de las 14.00 horas, momento en que finalizaron sus clases los estudiantes de los colegios, que se fueron acercando hasta la Plazuela dándole gran colorido. Asimismo, acudieron hasta la Plazuela numerosas personas que salían de trabajar a esas horas. Entre los que se acercaron en ese tramo horario estuvo el Obispo de la Diócesis, Raúl Berzosa.

Posteriormente, ya en el 'turno' de los alumnos de los institutos, llegaron hasta la Plazuela buena parte de los miembros del Equipo de Gobierno del Ayuntamiento: Marcelino Cordero, Pedro Muñoz, Enrique Cencerrado, Adoración Cañamero, Rosa Esquivel, Ignacio Hernández y María José Ramos (previamente había estado la concejal socialista Arantxa Lerones). Asimismo, también se pudo ver al candidato del PP a la Alcaldía de Ciudad Rodrigo, Marcos Iglesias.

Al tiempo que llegaban los miembros del Equipo de Gobierno también lo hicieron los alumnos del Seminario Diocesano de San Cayetano. Ambos grupos se encontraron con un problema: la falta de bocadillos preparados.

Tal y como explicó a Ciudad Rodrigo Al Día la delegada diocesana de Manos Unidas, Ana Isabel Lucas, numerosas personas habían acudido a la Operación Bocata sin comprar el ticket previamente, lo que había roto sus previsiones. En este sentido, Manos Unidas vende cada año tickets para la Operación en parroquias, colegios o institutos en los días previos. Sin embargo, numerosas personas optan por no comprarlo y esperar 'a ver qué tal sale el día' para acercarse o no a la Plazuela.

En la mañana del jueves hizo bastante viento en Miróbriga ?aunque en la Plazuela no se notaba tanto-, pero también hacía un agradable sol, lo que favoreció una gran afluencia de público hasta la Plazuela, quedándose cortos los bocadillos, incluidos los del 'margen de reserva' que se preparan cada año a mayores de los tickets vendidos. De hecho fue necesario hasta ir corriendo ?literalmente- a comprar barras de pan al supermercado más cercano.

La Campaña contra el Hambre 2015 de Manos Unidas continuará el próximo domingo en las parroquias diocesanas: la colecta de las misas dominicales irá a parar a la Campaña. Por último, el miércoles 11 el Centro Cultural y Recreativo El Porvenir acogerá la Cena del Hambre.