¡Alto el fuego!
Dediquemos, siquiera unos días, a reconciliarnos con nuestros enemigos, a dejar de lado las interminables peleas ideológicas y demos un respiro a los problemas que tanto nos enfrentan y distancian. Navidad nos ha sugerido siempre, independientemente de creencias, buenos sentimientos a casi todos y es recomendable un alto el fuego en esta batalla que es la vida.
Nos une el deseo de salud para todos, también para los que tuvieron suerte en la lotería. La necesitarán para disfrutar el premio. Pero no demos tregua a la solidaridad, a la generosidad. Estos días se hace más sangrante la situación de tantas familias que están sufriendo, sin disponer de lo más primario para subsistir, incomprensible en el siglo XXI, después de haber vivido años de vino y de rosas. A pesar de lo reconfortante que puede parecer y es ver cómo quién más y quién menos aporta alimentos para paliar tanta penuria, no deja de ser penoso y lamentable tener que reconocer los motivos que generan esta generosidad necesaria e imprescindible. Lo del Plan Marshall fue una minucia para lo que necesitamos ahora. Aprovechen nuestros dirigentes para meditar si, desde su responsabilidad y poder, han hecho y están haciendo lo que cabría esperar para mitigar esta situación intolerable en los tiempos que corren.
Se está difundiendo por la redes sociales una imagen que tendría más gracia, si no fuera porque detrás hay todo un mensaje con visos de realidad. Este año tenemos un trio de Reyes Magos poco recomendable para escribirles y confiar en que harán caso a nuestras peticiones:MALHECHOR, MANGAR y VAAESTAFAR. El ingenio de algunos no para, y aunque del género negro, tomémoslo con buen humor, por más que el horno no esté para bollos.
Que la FELICIDAD llegue a todos los hogares, que no falte la alegría, aunque falten otras cosas. El día que todos seamos capaces de entender que la generosidad tiene que anidar en nuestros corazones, estaremos empezando a construir un mundo mejor, donde todos tendremos nuestro sitio, con más igualdad y dignidad, como seres humanos que somos.
¡¡¡FELIZ NAVIDAD!!!
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