Sin casi darnos cuenta

Tan absortos estamos en nuestro día a día que casi no nos hemos dado cuenta de que tenemos encima la Navidad. Probablemente, el paso de los años y la pérdida de una gran parte de los llamados valores fundamentales estén haciendo mella en una ciudadanía que está más que harta de que la pretendan convencer con argumentos banales y cargados de intencionalidad.

Pero, como la Navidad, dicen, que es para celebrarla, pues adelante. El Ayuntamiento de Salamanca quiere animar la ciudad y dar vida a sus calles y por ello pondrá en marcha un programa de actividades lúdicas, que incluye una treintena de pases por las calles de la ciudad con espectáculos centrados en los comercios, escaparates y consumidores.

Mientras, la Diputación exhibe una colección de dibujos y esculturas del artista salmantino Venancio Blanco y la Universidad pone a disposición del público "Destierro/Des-cielo. Unamuno, de París a la República. 1924-1930", una muestra que repasa el periodo comprendido entre el momento en que el pensador vasco decide abandonar Fuerteventura con destino a París, en 1924, y el de su retorno triunfal, en 1930.

Tres opciones, pues, para vivir de otro modo unas fechas en la ciudad de Salamanca, la cual, por cierto y por si alguien aún no se ha enterado, ya dispone de una nueva glorieta y monumento dedicados al ex presidente Adolfo Suárez y de un cuadro del rey Felipe VI, obra del pintor salmantino Ángel Luis Iglesias, que cuelga en el salón de recepciones del Consistorio en sustitución del de Juan Carlos I.

Un fin de año ajetreado que, a buen seguro, sólo será un avance de lo que nos espera a los ciudadanos, sobre todo en los primeros meses de 2015 ?elecciones municipales y autonómicas- y ya en los últimos los comicios generales. Los pucheros ya han empezado a hervir en las cocinas y las "comiditas" no serán, a buen seguro, del agrado de todos.